Cuatro cineastas locales estrenan filme en Festival de Cannes
Manuela Martelli, Ignacio Rodríguez, Matías Rojas y Teresita Ugarte realizan que se dará en la Quincena de Realizadores,
Hay que cumplir con algunas reglas de exigencia espartana, pero a cambio la película es estrenada en el Théâtre Croisette del Festival de Cannes 2015. Es decir, en una vitrina de inmejorable exposición. Se trata del proyecto Chile Factory, colectivo cinematográfico de cuatro cortometrajes a cargo de cineastas locales que llegará a la Quincena de Realizadores del encuentro galo.
La iniciativa desarrollada por esta muestra paralela de Cannes ya tuvo antes dos versiones: Taipei Factory y Nordic Factory, que involucraron realizaciones de directores taiwaneses y nórdicos (daneses, finlandeses y suecos) respectivamente. El director de la Quincena, el francés Edouard Waintrop, afirma de visita en Chile: “Cinematográficamente, Chile es uno de los países más interesantes de América Latina. Estamos muy conscientes de su nivel”.
Los cuatro directores locales desarrollan cortos de 15 minutos que luego se en- samblan en un largometraje de una hora. Cada uno de ellos co-dirige en Chile con un cineasta extranjero: a Manuela Martelli se une la keniata Amirah Tadjin; Ignacio Rodríguez ( La chupilca del diablo) trabaja con la iraní Sara Rastegar; Matías Rojas ( Raíz) filma junto a la japonesa Mariko Saga; y Teresita Ugarte se une al israelí Ofir Raul Grazier.
“Es un muy buen ejercicio de cine de guerrilla, contra reloj. Tenemos sólo cinco dí a s de r odaje, c i nco de montaje y un par de meses de preproducción y conocimiento mutuo con el otro director. El guión lo armamos vía skype. En mi caso me tocó Ofir Raul Grazier, que es de Israel y vive en Alemania. El corto se llama Mi general, lo protagoniza Tomás Vidiella y es sobre un ex militar que todas las noches visita un night club en Avenida Matta con Portugal”, explica Teresita Ugarte, que ahora entra al proceso de montaje. En similar fase está Ignacio Rodríguez, cuyo corto Meteoritos transcurre en San Pedro de Ata- cama. “Es la historia de dos viejos amigos, interpretados por Jaime Vadell y José Soza, que van al desierto de Atacama a desenterrar un tesoro que dejaron ahí hace 40 años. Es una suerte de comedia absurda”, cuenta Rodríguez, conocido por su filme La chupilca del diablo, también, con Jaime Vadell.
La actriz e incipiente directora Manuela Martelli se encuentra en Ancud (Chiloé) filmando su cortometraje. “Es una historia con actores no profesionales acerca de una mochilera que llega a Chiloé y conoce a recolectoras de alga”, dice.
Un poco más al norte, en la localidad de Cochamó, se ubica Matías Rojas, que filma una cinta en el contexto del aborto. “Es una trama donde se habla de este tema, pero desde el punto de vista de las mujeres rurales, sin el acceso a toda la información que existe en la ciudad. Lo protagonizan Blanca Lewin, Paula Zúñiga, Luis Dubó y varias mujeres que son de la zona, pero que no son actrices profesionales”, cuenta.