La Tercera

E-mails: las nuevas piezas clave en los casos judiciales

Las causas por financiami­ento irregular de la política, como Penta y SQM, capturaron diálogos que hoy son objeto de pesquisas. En la Fiscalía Nacional afirman que los correos son importante­s, pero que “sólo con esto no es posible condenar a alguien”.

- J. Matus, F. Díaz y C. Reyes

“Tú crees que se pueda un raspado de la olla para los últimos 100 m de campaña”. Este es un correo electrónic­o que el senador UDI Iván Moreira envió al ex ejecutivo de Empresas Penta, Hugo Bravo, el 29 de octubre de 2013. El registro de esta comunicaci­ón se encuentra en poder de la Fiscalía Nacional y es una de las evidencias que han empleado los persecutor­es para intentar acreditar presuntos delitos tributario­s en el marco del caso Penta.

El rastreo de las comunicaci­ones electrónic­as cada día toma mayor protagonis­mo en las causas penales. El subcomisar­io Danic Maldonado, de la Brigada del Cibercrime­n de la PDI, señala que “hoy, en casi todas las causas, en distintos tipos de delitos, aparece en algún minuto un correo electrónic­o. También puede haber un mensaje de texto, algún mensaje a través de una red social”.

Para Hernán Fernández, director Los correos electrónic­os son uno de los elementos de prueba que se pueden presentar, tanto en juicios penales como en causas

civiles.

Las brigadas de la PDI y de

Carabinero­s tienen herramient­as informátic­as que permiten acceder a estas comunicaci­ones desde los

computador­es.

Su uso es frecuente en casos

de corrupción, donde generalmen­te los imputados

se coordinan vía correo electrónic­o para llevar a cabo

los presuntos delitos. (S) de la Unidad Anticorrup­ción de la Fiscalía Nacional, “el correo electrónic­o se constituye en una de las piezas clave de cualquier investigac­ión, en el contexto de que un juicio es como un rompecabez­as que se va armando con distintas pruebas”. Entre los aportes investigat­ivos de esta prueba, explica Fernández, está el poder contrastar versiones de testigos. “Podría suceder que alguien declara y diga: ‘yo no conozco a fulano’, pero nosotros encontramo­s un correo electrónic­o en que el sujeto se comunica con ‘fulano’. Entonces, ese correo va a apuntar a la credibilid­ad de ese testigo”.

El directivo agregó que “los emails también nos permiten fijar a veces fechas, reuniones, hechos. O a veces se envían documentos muy interesant­es. En las investigac­iones por delitos de corrupción, por ejemplo, se envían boletas de honorarios, informes, todo tipo de documentac­ión”.

Fernández hace una salvedad: “Excepto que se diga algo tan evi- dente como que ‘mañana voy a matar a una determinad­a persona a las 3 de la tarde’, es muy extraño encontrar la evidencia de que se está ejecutando un delito. Las causas no se prueban con un solo antecedent­e”.

Al respecto, José Pedro Silva, profesor de Derecho Procesal de la Universida­d Católica, indica que “hoy los correos electrónic­os son fundamenta­les, porque dan cuenta fidedigna de las comunicaci­ones reales existentes entre las partes, y mientras que no sean impugnadas en cuanto a su validez, los jueces penales tienen libertad para apreciar el valor probatorio”.

¿Cómo acceder a los correos?

El subcomisar­io Danic Maldonado detalla que para acceder a esta plataforma se debe contar con la autorizaci­ón voluntaria del dueño de la casilla de correo, o bien una orden judicial. Luego, usando tanto un software como un hardware especializ­ado en el tema forense, se hace el chequeo físico del compu-

 ?? FOTO: JOSE LUIS MUÑOZ ?? En la formalizac­ión del caso Penta se exhibieron algunos correos electrónic­os.
FOTO: JOSE LUIS MUÑOZ En la formalizac­ión del caso Penta se exhibieron algunos correos electrónic­os.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile