Los factores que amenazan el proceso de paz entre el gobierno de Colombia y las Farc
Amarradas con una cinta con los colores de la bandera de Colombia, las 297 páginas que componen el acuerdo de paz entre el gobierno de ese país y la guerrilla de las Farc, fueron entregadas oficialmente ayer por el propio Presidente Juan Manuel Santos al líder del Congreso.
El miércoles y tras casi cuatro años de negociaciones en La Habana, el gobierno anunció que ambas partes llegaron a un acuerdo en todos los puntos que estaban pendientes. Las negociaciones se dieron por concluidas y a pesar de que aún se desconoce la fecha de la firma (se estima que podría ser entre el 23 y 25 de septiembre), el gobierno y sus partidarios celebraron este hito.
El mandatario se encuentra ahora un paso más cerca de la aprobación del acuerdo que pondrá fin a más de 50 años de conflicto armado, que dejó 260 mil muertos. Pero además de la paz, Santos se jugará su capital político en los siguientes meses.
Esto, porque aún queda un largo camino por recorrer antes de alcanzar la paz. Estos son algunos de los factores que podrían entorpecer e incluso detener el acuerdo entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) y el gobierno.
* El plebiscito
La consulta pública que medirá el apoyo ciudadano a los acuerdos de paz ya tiene fecha. El 2 de octubre los colombianos acudirán a las urnas en la primera prueba política para Santos y su tan ansiado acuerdo de paz.
Para que el acuerdo sea refrendado el “Sí” debe ganar la consulta con un mínimo 4,4 millones de votos, equivalentes al 13% del padrón electoral. Pero, además, el referendo solo será válido si participa al menos un 13% de los colombianos habilitados para votar.
Según una encuesta realizada por Datexco para El Tiempo y la W Radio, la intención de voto del “Sí” tiene un 32,1% frente a la opción del “No” que obtuvo un 29,9%. La opción que rechaza los acuerdos, sin embargo, tiene el apoyo de un sec- El gobierno de Juan Manuel Santos y las
Farc anuncian un acuerdo en los puntos
pendientes. Se estima que la fecha
de la firma de los acuerdos de paz podría darse entre el 23 y 25 de
septiembre. El gobierno espera
llevar a cabo un plebiscito para avalar los acuerdos de paz entre
ambas partes. tor influyente: el del ex Presidente Alvaro Uribe (20022010). “Esta votación se da en el contexto de una polarización nacional alrededor de algunos temas de la negociación, en particular los mecanismos de participación política y de justicia transicional y de una férrea oposición del Centro Democrático, partido político que lidera el ex Presidente Uribe”, explicó a La Tercera la analista política de la Universidad Javeriana, Patricia Muñoz.
¿Y qué pasa entonces si el “No” se impone ante el “Sí”? Según la revista Semana, si la población no apoya el acuerdo, las consecuencias son impredecibles. Según la Corte Constitucional de ese país, la decisión que determine el plebiscito no será jurídicamente vinculante, pero sí en términos políticos. En caso de que gane el “Sí”, Santos tiene la obligación de implementar los acuerdos y si gana el “No”, no podrá hacerlo. Pero como no es jurídicamente vinculante, el mandatario puede seguir buscando la paz con un acuerdo distinto.
Así, Santos podría renegociar el acuerdo si los colombianos lo rechazan. Justamente a ese argumento se aferra el Centro Democrático de Alvaro Uribe, asegurando que el acuerdo de paz puede mejorar, especialmente en lo que se refiere al rol de los guerrilleros en política y en la impunidad que generaría el acuerdo, según alegan. “Las voces en este sentido apuntan a que el gobierno podría buscar otros caminos para la implementación del acuerdo, reestructurar algunos de sus puntos aprovechando el resultado del proceso de negociación culminado sin que se pierda el proceso vivido”, dice Muñoz.
* Las Farc en la política
El acuerdo busca desarmar a la guerrilla de las Farc y comenzar su proceso de transformación en un partido político. De formalizarse el pacto se extinguiría el último gran movimiento armado de América Latina. Ayer Santos ordenó un alto el fuego definitivo a partir del lunes 29 de agosto. Sin embargo hay una creciente desconfianza ciudadana a las Farc. Los opositores al pacto, encabezados por Uribe, están usando como uno de sus principales argumentos su eventual rol en la política local. La mayoría de los sondeos indican que el porcentaje de rechazo a que las Farc entren en política supera el 70%.
“El punto de mayor resistencia por parte de los ciudadanos, que se refleja en las encuestas de opinión pública, tiene que ver con la participación de miembros de las FARC en política, en particular si no llegaran a pagar condena por los delitos que se le atribuyan a la guerrilla”, asegura Muñoz.
* Tribunales especiales
Quienes lideran la campaña por el “No” plantean que el pacto le ofrece una amnistía a los guerrilleros por sus crímenes y también subsidios para que busquen trabajo, algo que sería, en su opinión, algo injusto para quienes sí cumplen con la ley. Según el acuerdo, quienes confiesen sus crímenes ante un tribunal especial podrán evitar un encarcelamiento y recibir penas alternativas. Si deciden no hacerlo y son declarados culpables, serán condenados a penas de ocho a 20 años. Hay quienes rechazan el acuerdo por este motivo.b