Fuerte repunte en PSU: puntajes nacionales suben a 163 y casi triplican a los de 2015
Una pregunta en Matemática sería la que marcó el alza en los resultados, ya que el año pasado no fue respondida por muchos. Bajaron las máximas puntuaciones de los recintos municipales en comparación con el año pasado.
Casi el triple de puntajes nacionales hubo en este proceso de la Prueba de Selección Universitaria (PSU) en comparación con 2015, año que marcó el más bajo récord de resultados máximos, registrado desde 2004.
Así, en esta ocasión, siguiendo la tendencia de años anteriores, la mayor cantidad de puntajes nacionales se concentró en Matemática (116) y Ciencias (39), mientras que Historia (2) y Lenguaje (5) fueron las dos áreas con menos puntuaciones máximas. Además, 10 personas obtuvieron doble puntaje nacional.
¿A qué se debió el alza? Fuentes del Demre precisan que la anomalía se produjo en realidad el año pasado, cuando los puntajes nacionales cayeron a 64 producto de que en la prueba de Matemática se incluyó una pregunta de un contenido nuevo que había sido poco abordado en los colegios. Debido a eso, una gran cantidad de postulantes se equivocó en esa pregunta, lo que provocó la disminución de puntajes máximos en esa materia y una baja general. La pregunta de ese contenido, en cambio, este año sí fue respondida correctamente por más alumnos, lo que hizo que repuntaran los puntajes de Matemática.
Para los expertos, los puntajes nacionales son muy sensibles. “Tienen que ver con la naturaleza de las preguntas y la composición del alumnado. A veces hay mas alumnos buenos en una generación que en otra y con los mismos profesores puedes sacar más puntajes nacionales”, señaló José Joaquín Brunner, investigador de la U. Diego Portales (UDP).
Las brechas
Las cifras de este año reflejan nuevamente diferencias de género: 72,96% de los puntajes nacionales se concentraron en hombres, mientras que un 27,04% en mujeres. Eso sí, este año la distribución favorece un poco menos a los hombres respecto del año anterior, ya que en 2015 el 88,71% de las máximas puntuaciones provenían del universo masculino.
En tanto, las diferencias por tipo de establecimiento también son visibles este año. Los colegios particulares pagados obtuvieron 112 puntajes nacionales, es decir, el 69,1% del total. En tanto, los liceos subvencionados figuran con 32 (19,7%) y los municipales con 18 (11,1%). Con esta distribución se invierten los porcentajes del 2015, cuando en segundo lugar los recintos municipales concentraban los puntajes nacionales, con un 16,3% y luego seguían los subvencionados con 11,29%.
Para Jorge Manzi, director de Mide UC, es importante considerar el universo que rindió la prueba: “Uno tendría que pensar cuántos alumnos de colegios municipales rindieron la prueba este año y cuántos el año pasado. Porque está ocurriendo que con el tiempo ha habido una disminución de la matrícula en enseñanza pública respecto de la particular subvencionada, que es la que está creciendo. Por tanto, pensándolo mecánicamente, lo que debiera ocurrir frente a eso es que año tras año disminuyan la cantidad de puntajes nacionales de los municipales y suban los de particulares subvencionados”, señaló el experto de la UC.
Los expertos coincidieron en que los puntajes nacionales no sirven para estudiar tendencias, pero explicaron que igual refuerzan tesis que ya en Chile están comprobadas, como la de que los resultados de la PSU tienen una alta correlación con el origen socioeconómico.
“Sabemos que los establecimientos que tienen la mayor cantidad de puntajes nacionales son colegios que atraen alumnos provenientes de familias con mucho capital educacional, económico, social y cultural, y que además se esfuerzan por apoyar la educación de sus hijos; o vienen de sectores medios, pero tremendamente meritocráticos, donde los padres están muy pendientes de la educación de sus hijos”, explicó Brunner.
El académico de la UDP agregó que “los puntajes nacionales no son los alumnos más inteligentes de Chile. Es una mezcla muy grande de esfuerzos y en muchos casos de condiciones de fortuna de la cuna”.
Para Jorge Manzi, el alto capital cultural de los padres presente en los colegios particulares es algo con lo que no pueden competir las otras dependencias. “Históricamente, la educación particular ha sido selectiva socioeconómicamente y esa razón tiene un componente relacionado con el desempeño. La escolaridad media de los padres de alumnos de colegio particulares es seguramente unos seis años mayor en promedio que los alumnos de colegios municipales, y esos mayores años de escolaridad de los padres es una diferencia que la escuela no puede controlar”, dijo Manzi.