La visita del ministro boliviano
Señor director:
La detención de militares y funcionarios bolivianos tensa nuevamente las relaciones entre Chile y el país altiplánico. Las acusaciones mutuas relativas a la violación de sus soberanías están siendo instrumentalizadas no solo por Bolivia, sino también por Chile, condicionando el estatus internacional de nuestro país.
Lo anterior se refleja en la decisión del gobierno de no autorizar la visa para que Reymi Ferreira, ministro de Defensa de Bolivia, visite a los militares y funcionarios que se encuentran detenidos en Chile.
En este sentido, con independencia de que no existan relaciones diplomáticas entre ambos, todos los estados, en función de normas de derecho consuetudinario internacional y de la Convención de Viena de Relaciones Diplomáticas, tienen el deber de defender a sus nacionales en el extranjero. Chile decidió negar el ingreso perdiendo la oportunidad de demostrar que es un Estado que no condiciona su estatus internacional en función de las irresponsables actitudes de autoridades extranjeras.
A esta sesgada decisión se agrega la relativa a exigir visado a los diplomáticos bolivianos. Si bien ambas posturas son parte del ejercicio soberano del Estado, las considero una pésima estrategia, ya que condicionan la imagen con la que Chile llega al juicio ante la Corte Internacional de Justicia, mostrándose como un Estado que valida las represalias.
Eso no es propio de un país que resuelve pacíficamente sus controversias, no solo desde el derecho, sino también desde los hechos. Pedro Díaz Polanco
Director Escuela de Administración Pública Universidad Austral