Casos de virus Hanta reportados a mayo superan los totales anuales desde 2005

► Minsal confirmó 66 contagios en los primeros cinco meses, 15 más que en todo 2016. ► Los incendios forestales y la proliferación del alimento del roedor explicarían el alza.

Un total de 66 casos de virus Hanta, a nivel nacional, contabilizó el Ministerio de Salud (Minsal) entre enero y mayo pasado. Se trata de la cifra más alta desde 2005 cuando, considerando todo el año, se registraron 67 personas infectadas.

Así lo indica un informe del Departamento de Epidemiología del Minsal, que señala que hasta el 23 de mayo se superaron los 51 contagios de todo 2016. Asimismo, mientras el año pasado perecieron 11 personas, en los primeros cinco meses de 2017 ya se contabilizan 13 fallecidos

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“Esta patología comienza con síntomas similares a los de un cuadro gripal y puede derivar a una insuficiencia respiratoria y shock cardiovascular”, acota el infectólogo de la Clínica Alemana Pablo Vial.

El incremento de infectados preocupa en el Minsal. Así lo reconoció el subsecretario de Salud Pública, Jaime Burrows, quien explica que el número se debe al aumento de población del roedor silvestre de cola larga (Oligoryzomys longicaudatus), que transmite el virus a través de su orina y fecas.

“Cada cierta cantidad de años se da un fenómeno que se conoce como ratada, que es cuando se dan las condiciones de un mayor florecimiento de la quila, su alimento predilecto. Con este aumento se producen las ratadas y eso permite que estén mucho más expuestos los trabajadores rurales y los turistas”, señala Burrows.

Sin embargo, la autoridad sanitaria destaca que en los últimos años ha bajado el porcentaje de letalidad. De este modo, si en 2006 hubo un 44% de fallecidos producto del virus, a la fecha se registra un 19,7%.

Burrows lo atribuye al rápido diagnóstico ante los síntomas y a la derivación oportuna a centros asistenciales que cuenten con circulación extracorpórea (ECMO) -una terapia de soporte que intenta suplir externamente la función de los pulmones- y suero hiperinmune, que se obtiene de aquellos pacientes que sobrevivieron al virus y se aplica a los infectados.

“Hemos insistido en aumentar el nivel de sospecha a través de un hemograma y una radiografía de tórax”, agrega el subsecretario.

Incendios

El infectólogo de la Red de Salud UC Christus Carlos Pérez explica que la quila aumenta cuando hay temporadas lluviosas. Sin embargo, afirma que no es la única razón del incremento de los contagios. “Los incendios forestales, indudablemente, fa- vorecen la migración de estos roedores, que estaban en su hábitat normal, hacia poblados cercanos. Por eso puede existir un mayor riesgo de contacto con seres humanos”, señala el experto.

Entre los 66 infectados se encuentran 17 trabajadores agrícolas, 16 estudiantes, cuatro empleados forestales y ocho dueñas de casa. Sobre este último grupo, la médico microbióloga del Hospital de Puerto Montt y miembro de la Sociedad Chilena de Infectología, María Luisa Rioseco, postula que “la mayoría de estas mujeres viven en contacto con sectores rurales. Por ejemplo, alrededor de la casa pueden haber bodegas y cúmulos de leña, que hacen que estén expuestas en el ambiente peridomiciliario, pues en estos lugares hacen acciones de recolección y cuidado de jardines”.

Pérez añade que “hay que ver si esa tendencia se mantiene o si fue solo en el primer trimestre y el resto del año será de forma habitual. No diría que es una amenaza que se va a mantener”. Rioseco, en tanto, pide avanzar en un tratamiento que ataque la enfermedad y no solo en sus síntomas.b