Objeción de conciencia
Señor director:
El debate sobre la objeción de conciencia es una conversación incompleta que ha invisibilizado factores relevantes.
El ejercicio concreto de la objeción en el caso de la interrupción del embarazo puede terminar convirtiéndose en denegación de atención a la paciente. En vastos sectores de Chile -en especial en zonas rurales- la escasa disponibilidad de especialistas redundará en que en la práctica imposibilite la intervención médica. Si a este factor sumamos la extensión que se pretende hacer de dicha facultad al personal que colabora en la atención, en los hechos se hace imposible que el Estado cumpla su deber de atención. El propio Colegio Médico, a través de su presidenta recién asumida, ha destacado que esta discusión no puede seguir sumando trabas para la interrupción del embarazo en las tres causales. En un Estado laico, además, no debe existir lugar a objeción de conciencia en establecimientos de salud públicos, ni en aquellos que reciban cualquier tipo de financiamiento del Estado. Ya bastante nuestra cultura y nuestro marco jurídico ha disminuido la ciudadanía de las mujeres, como para que sigamos sumando criterios y objeciones al ejercicio de lo que debiese ser un derecho privativo de ellas y su conciencia.
Las ideas matrices del proyecto que estamos terminando de discutir buscan romper, aunque sea parcialmente, el bloqueo que por décadas ha convertido a Chile en una de esas vergonzosas excepciones a nivel mundial en materia de derechos sexuales y reproductivos de la mujer. En ese contexto, la discusión sobre objeción de conciencia es válida pero no puede ser un escudo para doctrinas particulares, ni para impedir el ejercicio de un derecho que ha estado postergado por demasiado tiempo. dueña de la muestra, los cadáveres corresponden a ciudadanos o residentes chinos, y fueron obtenidos a través de la Policía China. Esta “puede recibir cuerpos de prisioneros chinos”, desligando su responsabilidad de la verificación de que los restos no correspondan a personas ejecutadas.
Un estándar mínimo para patrocinar este tipo de muestras es tener la certeza de que los cadáveres han sido donados para esos fines y que no correspondan a situaciones de violaciones a derechos humanos. Es importante que tanto los responsables como los patrocinadores de la muestra aclaren las circunstancias en que fueron obtenidos esos cadáveres.
Aclarando estos aspectos esenciales, el uso de cadáveres plastinados cumple un importante rol docente, no solo para estudiantes de carreras de la salud sino también para público general, que puede llegar a comprender aquello que suele estar reservado a unos pocos: la maravilla del cuerpo humano.
Sofía Salas Ibarra
Gonzalo Rivas G. excluyendo a quienes impulsamos el año 2011 el debate en educación superior. Sin embargo, esperamos que en el día de la votación final, exista consecuencia y no se retroceda. Puntos como la eliminación del CAE son cruciales en esta discusión. Daniel Andrade
Facultad de Medicina UDP
Presidente Consejo Nacional de Innovación para el Desarrollo
Presidente FECh
Rocío Fondón
Investigadora Asociada Centro de Estudios FECh