“Grupos armados se sienten libres para desafiar a la policía”
¿La violencia está fuera de control en Río de Janeiro? ¿Hubo otro período tan violento?
Los homicidios están cerca del nivel registrado antes de la intervención en las favelas, llamada Pacificación, iniciada en 2008. Las bases del programa en las favelas todavía funciona, pero los policías no tienen el control de la mayoría de los territorios, que son dominados por facciones criminales. Ese es el caso del Comando Vermelho, que controla el Complexo do Alemão, una de las mayores favelas de la ciudad. Esa pérdida de control hace que los grupos armados se sientan libres para desafiar abiertamente a la policía y sus rivales por control territorial, teniendo como resultado más inestabilidad y violencia armada.
¿Qué rol juegan las luchas de bandas narcos?
Un rol importantísimo. La violencia criminal en Río no es solamente por el dominio del tráfico de drogas, sino también por el control territorial para vender drogas, conducir la extorsión, almacenar armas o simplemente permitir a los miembros de las bandas un poder sobre las vidas de los habitantes. Ese tipo de lucha había sido puesta en “pausa” durante la fase inicial de la pacificación, alrededor de 2010, 2011 y 2012. Pero ahora los grupos no confían en la capacidad del Estado de castigar este tipo de comportamiento.
¿Fracasó entonces la estrategia de las UPP?
La estrategia de las UPP no ha fracasado. El fracaso ha sido de la administración pública, que no supo mantener la inversión o conquistar nuevas fuentes de financiamiento para el programa de pacificación. Es un programa costoso y que necesita de muchos policías, pero también es un programa estratégico y muy importante para el desarrollo social y económico de Río.
¿Cuánto incide la crisis política que hoy vive Brasil en la situación de Río?
El actual gobierno estadual, que es responsable por la Secretaría de Seguridad, está cada vez más involucrado en denuncias de la operación Lava Jato. Pero el impacto mayor en Río es de la crisis económica. La corrupción revelada por la Lava Jato puede tener un efecto muy dañino, de largo plazo, que es el desgaste de la confianza en los gobernantes. Uno de los resultados de eso puede ser la disminución de la confianza de las poblaciones en áreas inestables frente a las fuerzas públicas. Conquistar esa confianza ha sido un trabajo muy arduo para las UPP en años anteriores, pero ahora ese trabajo está muy debilitado.b