PARA ENTENDER
Según la Ocde, el desempleo de los extranjeros en Chile alcanza el 5,8%, lo que se compara con la de 7,9% de los nacionales.
La tasa de empleo de los inmigrantes llegó a 73,9%, muy por encima
del índice de los nacidos en el país, de
59,3%.
Según expertos, las brechas se explican por
la intención de los inmigrantes de trabajar y porque la mayoría de ellos está en edad de
hacerlo. 73,9% –el quinto mayor de la Ocde–, frente a 59,3% de los nacionales. La desigualdad de 14,6 puntos porcentuales es la más alta del grupo.
A juicio de Bravo, esto se produce por la disímil composición de la población migrante respecto de la local. “La tasa de empleo se define como el número de ocupados respecto a la población en edad de trabajar. Las cifras de la encuesta del INE muestran que alrededor del 80% de la población inmigrante es de 15 a 59 años, mientras que en el caso de los chilenos está en torno a 60%”, precisó.
El experto añadió que “los inmigrantes tienen una población más concentrada en personas que efectivamente se encuentran ocupadas, con una tasa de inactividad en torno a 24%, mientras que entre los chilenos es ligeramente superior a 40%”.
Perspectivas
Hacia adelante, Flores proyecta que la diferencia entre foráneos y nativos podría ampliarse, ya que el porcentaje de población inmigrante en Chile aún es pequeña frente a otros países.
“No me extrañaría que esa brecha pudiese crecer y que también pudiese alcanzar otro tipo de oficios que hoy día son desempeñados por chilenos”, como la actividad agrícola, afirmó.
En este sentido, Bravo hizo un llamado a modernizar la legislación migratoria, que es “absolutamente anticuada” y “no responde a los desafíos actuales”. El especialista sugirió cuidar el diseño para no afectar negativamente la composición de la migración, agilizar el proceso de validación de títulos y eliminar la cuota máxima de contratación de extranjeros de 15%.b