“COLAPSO DEL SISTEMA DE PROTECCIÓN A LA INFANCIA”
SEÑOR DIRECTOR
En su editorial de ayer, titulada como esta carta, se critica –a nuestro juicio, acertadamente– la manera en que el gobierno ha enfrentado la crisis de la infancia. En efecto: concediendo el diagnóstico que sostiene el ministro de Justicia, según el cual la institucionalidad “está colapsada, fracasó”, son inexplica- bles las prioridades legislativas que se han definido.
Con todo, no debemos perder de vista que el desafío que nos presenta la infancia vulnerada, es mucho más complejo que mejorar las residencias del Sename o dividir los servicios. Sin perjuicio que hacernos cargo de esta realidad es un desafío y prioridad urgente, un compromiso político integral y a largo plazo, debiera ponerse el foco en la superación de las causas en virtud de las cuales los niños son institucionalizados. De ahí que toda reflexión tiene que partir de la base que el hecho de que un niño llegue al Sename es un fracaso tanto social como familiar que debe ser, en la medida de lo posible, evitado.
En este sentido, no hay otra mejor manera de evitar que un niño sea vulnerado en sus derechos, que fortalecer el núcleo que por definición está destinado a su protección: la familia. Por lo mismo, las políticas de prevención de todo foco de conflicto, hoy día inexistentes, deben estar dentro de toda propuesta que quiera enfrentar correctamente el problema.
Carol Bown Sepúlveda Cristóbal Aguilera Medina