The Edge recorre viñas chilenas
Tal como ocurrió en 2011, The Edge fue el primer integrante del cuarteto en aterrizar en Santiago, previo al concierto de esta noche en el Estadio Nacional.
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Como todos los grandes nombres que han forjado un vínculo especial con el público chileno, se podría decir que los integrantes de U2 ya manejan algunos códigos para sus visitas al país, ciertas tradiciones. Ayer fue el turno de Dave Howell Evans, conocido bajo el alias de The Edge, guitarrista histórico del cuarteto irlandés y el rostro más reconocible del conjunto tras Bono, quien tal como en ocasiones anteriores, se adelantó a sus compañeros y llegó primero a Santiago en la antesala de un nuevo concierto en el Estadio Nacional.
El músico de 56 años aterrizó en la capital la noche del jueves pasado a bordo de un vuelo comercial proveniente de Argentina, donde esta semana el grupo ofreció dos conciertos en el Estadio Único de la Plata, como parte de la gira planetaria que conmemora los 30 años desde el lanzamiento de The Joshua Tree, uno de sus discos más emblemáticos. La misma que esta noche desembarca en Ñuñoa, en la que será la cuarta presentación del conjunto en el principal coliseo deportivo del país desde su debut de 1998.
Aprovechando las horas de descanso, y mientras el equipo de la banda ajustaba en el estadio los últimos detalles del complejo montaje del show, Evans salió por la mañana del hotel capitalino en el que se hospeda y se dirigió hasta una exclusiva viña de la zona central donde, según registran las fotografías que captaron algunos testigos, se paseó por las instalaciones, y probó y compró diversas variedades de vinos. Lo de ayer recordó lo ocurrido hace seis años con el mismo The Edge, cuando aterrizó en Chile casi una semana antes que sus compañeros y en casi total anonimato, destinando esos días previos para recorrer diversas localidades del norte en compañía de su esposa e hijos.
Por su parte, los arribos a Pudahuel de Bono, Adam Clayton y Larry Mullen estaban contemplados para anoche o a más tardar esta mañana, también desde Buenos Aires. Y aunque en los últimos días tanto músicos como autoridades han visto con buenos ojos la idea de un encuentro formal, hasta ayer no estaba completamente confirmada la visita del grupo a La Moneda, debido a la apretada agenda que manejan los irlandeses. ●