ADOLESCENTES E IDENTIDAD DE GÉNERO
SEÑOR DIRECTOR
El diputado Sergio Espejo ha defendido en este medio que los adolescentes puedan cambiar su identidad registral sin el consentimiento de sus padres. Su argumento consiste en que los padres a veces se equivocan, y que tales errores pueden provocar daños irreparables, incluso el suicidio. Su opinión contiene una gran debilidad: asume una relación causal entre una posible oposición de los padres y conductas de deserción escolar, abandono de hogar y suicidio. Considerando que posiblemente existan casos así, debemos preguntarnos si acaso tales comportamientos se deben directamente a la negativa de los padres, o bien obedecen a otras causas más profundas, como por ejemplo, a estructuras psicológicas vulnerables o a la presencia previa de trastornos psicológicos que incluyen tendencias autodestructivas. En estos casos, una negativa de los padres al cambio de identidad registral vendría a ser un desencadenante, pero no la causa de tales comportamientos, del mismo modo que una discusión es ocasión y no la causa de la ruptura de una relación de pareja.
Por lo demás, junto con el reconocimiento de que los padres se equivocan, es necesario reconocer que los adolescentes también lo hacen -y no poco-, lo que ha sido explicado por la psicología desde hace décadas: están en etapa de cambio, de búsqueda y de exploración, y no de resoluciones definitivas sobre su identidad y sexualidad.
Juan Pablo Rojas
Psicólogo