Tiger destaca a Niemann en la nueva generación
“Este juego está creciendo; antes ustedes (los latinos) tuvieron aquí a Joaquín, quien jugaba muy bien”, dijo.
Una extensa conferencia de prensa de cara realizó Tiger Woods (43 años) tras conseguir por quinta vez en Augusta. Le preguntaron de todo y ante la consulta de un reportero latino sobre el mexicano Álvaro Ortiz, el primer campeón del Latin America Amateur Championship en pasar el corte del Masters, el estadounidense destacó a otro jugador: Joaquín Niemann.
“Este juego está creciendo; antes ustedes tuvieron aquí a Joaquín, quien jugaba muy bien. Ahora hay jugadores desde todo el mundo, ellos son más jóvenes, mejores, tienen hambre de jugar”, dijo. “Es cosa de ellos encontrar las oportunidades y ya no vienen solo de países históricos como Estados Unidos, el Reino Unido, Australia, Sudáfrica o Japón, es un deporte global”, agregó.
Niemann jugó el Masters de 2018 y ese año compartió prácticas con Woods en un par de torneos, como el PGA Championship.
Independientemente de la alusión a la nueva y exótica camada del golf, Woods vive este brillante momento como una resurrección, luego de 11 años de problemas personales y lesiones.
A los 25 años se convirtió en el primer jugador en ganar en
una misma temporada los títulos del US Open, British Open, PGA Championship y Masters, hazaña que pasó a apodarse Tiger Slam, al completarse en 2001 en Augusta.
A partir de ahí, todo pareció ser éxito, pero en noviembre de 2009 un extraño accident en Florida destapó las infidelidades que destruirían su matrimonio y, también, reveló el consumo de poderosos analgésicos debido a los problemas en su espalda.
Perdió patrocinadores y tomó un “descanso indefinido del golf profesional”. A partir de ahí, todo se volvió nebuloso y confesó que “apenas podía caminar”, dijo.
En abril de 2017 se operó y todo comenzó a mejorar, pues la cirugía fue éxitosa. “He podido participar de la vida de mis hijos de una manera en que no pude por varios años. Ahora estoy empezando a jugar con ellos y hacer cosas en sus deportes. Eso es algo que siempre extrañé”, recalcó ese mismo año.
El domingo, después de que hundir su putt ganador el domingo y soltar un rugido liberador mientras levantaba el palo y el puño hacia el cielo, los fanáticos comenzaron a cantar “¡Tiger! ¡Tiger! ¡Tiger!”. Fue una nueva y quizás la última confirmación de que el rey está de regreso.b