Concón: emanación de Enap impactaría sector residencial
Una de las medidas que adoptó el gobierno, después de la crisis ambiental de agosto y septiembre de 2018, en Quintero y Puchuncaví, fue encargar al Instituto Noruego de Investigación del Aire (NILU) un estudio para conocer qué compuestos orgánicos
volátiles (COV) están presentes en la zona.
En marzo de este año, en tanto, el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) señaló que los resultados preliminares del análisis, que midió las concentraciones de metilcloroformo, nitrobenceno, isobutano y tolueno, se ajustaban “a la
norma europea”.
No obstante, aunque el informe final emitido por la entidad ratifica “bajas concentraciones” de hidrocarburos en la zona, también revela que “la situación en Concón es distinta a la de Quintero–Puchuncaví. La intensidad de la fuente de la refinería (de ENAP) tiene un
impacto mayor en el área residencial cercana”.
“La suma de hidrocarburos llegó hasta 325 ug/m3 durante la noche y con baja velocidad del viento. La concentración máxima de COV fue de hasta 2.000 ug/m3 en una vivienda, durante una sola medición”, se indica en las conclusiones del
estudio.
El NILU, entidad privada, sin fines de lucro, y con 50 años de experiencia, además reconoce que las “mediciones de COV del presente estudio no representan la peor condición meteorológica en la zona”, pues se realizaron entre noviembre de 2018 y enero de 2019, y que
“la nariz es un buen detector de concentraciones excepcionalmente altas de hidrocarburos”.
En paralelo, recomienda “implementar un plan de monitoreo de COV en la región” y, asimismo, “crear un laboratorio chileno para el análisis de COVs en áreas industrializadas y urbanas”.b