Gobierno defiende respuesta de FF.AA. a informe de Amnistía
En medio de críticas por la intervención pública de los uniformados tras el informe de Amnistía Internacional, el ministro de Defensa señaló ayer que “tienen pleno derecho a defenderse”.
Fue una decisión que se adoptó en el comité político del jueves, en el que participó el Presidente Sebastián Piñera, y que, posteriormente, fue visado por el ministro de Defensa, Alberto Espina. Así se zanjó el comunicado que emitieron las Fuerzas Armadas rechazando el duro informe de Amnistía Internacional, en el que se plantea una “intención de las fuerzas de seguridad” de “dañar a quienes se manifiestan para desincentivar la protesta, incluso llegando al extremo de usar la tortura”.
La reacción de las FF.AA. generó críticas desde distintos sectores. Por ejemplo, el excanciller Juan Gabriel Valdés comentó que “es inconstitucional, no son deliberantes”, junto con señalar que lo ocurrido es “grave porque se abre una puerta que cuesta mucho cerrar”.
En este escenario, el gobierno salió a respaldar ayer la actuación de los uniformados, asegurando que están en su derecho de defenderse. “No hay ningún acto de deliberación en lo que han hecho las Fuerzas Armadas. Yo estuve en conocimiento de esa declaración y me pareció que es correcto, porque no hay ningún juicio político que se emita”, dijo el ministro de Defensa, Alberto Espina, quien también recalcó que las Fuerzas Armadas están “sometidas a la autoridad civil”. Al ser consultado sobre si será recurrente que los uniformados realicen este tipo de intervenciones, Espina añadió: “Siempre han sido, serán y seguirán siendo conducidas políticamente por el ministro de Defensa”.
La polémica ya había sido abordada previamente por la vocera de gobierno, Karla Rubilar, quien dijo en radio Cooperativa que la declaración de las FF.AA. fue visada por Defensa, y justificó la reacción.
En este contexto, además, el Ejecutivo profundizó ayer en sus cuestionamientos al informe de Amnistía. Rubilar afirmó que “no corresponde decir que hay una política deliberada para dañar a manifestantes” y que “eso no lo vamos a aceptar”, mientras que Espina recalcó que “es un hecho gravísimo, falso y una imputación inaceptable”.
El ministro del Interior, Gonzalo Blumel, y su par de Justicia, Hernán Larraín, también reprocharon el contenido del informe. Esto, luego de que Piñera encabezara ayer una reunión con el Comité Interministerial de Derechos Humanos, instancia en la que se acordó crear un comité técnico asesor en DD.HH., en el que -además de la composición permanente- se invitará a distintos actores.
De igual manera, en medio de las múltiples críticas que generó la reacción de La Moneda ante el informe de Amnistía, la subsecretaria de Derechos Humanos, Lorena Recabarren,
a quien La Moneda mandató el jueves a que rechazara el escrito, defendió al gobierno y su postura. “Ante las reacciones generadas por la declaración del gobierno ante el informe de Amnistía Internacional, quiero aclarar algunos puntos. El Presidente y quienes hemos hablado desde el gobierno, lo hemos señalado: no habrá impunidad”, dijo en su cuenta de Twitter en relación a las denuncias por violaciones a los derechos humanos.
Polémica por audiencia
“No tengo información específica al respecto de qué pasó con Amnistía”, dijo ayer la ministra Rubilar respecto a los dichos del organismo sobre que sí solicitaron una audiencia con el Presidente Piñera, mientras que Blumel afirmó que, en su caso en particular, no ha recibido ninguna solicitud, pero que las puertas están abiertas.
La directora para las Américas de Amnistía, Erika Guevara-Rosas, desestimó la versión del Ejecutivo. Y, a través de su cuenta de Twitter, publicó un documento que acredita que solicitaron audiencia con Piñera el pasado 13 de noviembre, y que está firmado por la recepción de documentos de La Moneda. En Presidencia confirmaron la petición, pero argumentaron que no se recibió a Amnistía debido a la poca anticipación y porque se priorizaron otras cosas de la agenda. ●