ELSENTIDO COMÚN Y EL RECHAZO EN EL PLEBISCITO
SEÑOR DIRECTOR
Las últimas encuestas han estado pronosticando un alza en la opción “rechazo” en el plebiscito del próximo 26 de abril. Me parece que esto se debe a varios factores.
Entre ellos, que la opción “rechazo” fue percibida inicialmente como la opción de aquellos que estimaban que todo estaba bien en el país, que los cambios no eran necesarios. Nada más lejos de la verdad. Los que apoyamos el “rechazo” lo hacemos porque sabemos que los cambios sociales que más preocupan a los chilenos -mejores pensiones y remuneraciones, mejor salud y educación pública, mejor transporte público, precios de medicamentos más
bajos y tantos otros- no se logran a través de cambios a la Constitución, sino que a través de cambios legales que prioricen los cambios que las mayorías desean. Y los que apoyamos el “rechazo” apoyamos estos cambios. Aún más, apoyamos cambios a la Constitución actual, a través del Parlamento, pues obviamente toda obra humana es perfectible.
Por otra parte, el triunfo del “apruebo” significará alrededor de dos años de gran incertidumbre, pues la redacción de una nueva Constitución en una hoja en blanco tomará tiempo y afectará la inversión y la contratación. Esto afectará con más fuerza a los grupos más vulnerables, clase media y jóvenes en busca de trabajo u otras oportunidades de progreso personal.
Después de esos dos años, vaticino que nos presentarán un texto constitucional que no corrige ninguno de los problemas que aquejan a los chilenos, sino que será un texto que otorgue más funciones al Estado y sus asociaciones todopoderosas, limitando entonces la libertad y el progreso de los chilenos.
Digámoslo francamente: un nuevo texto constitucional con mayores atribuciones para la burocracia del Estado es un objetivo político de la izquierda desde hace mucho tiempo. Mal que mal, ellos son parte de esa burocracia, para la cual la actual Constitución tendría un pecado de origen que no pueden aceptar. Les da lo mismo que Ricardo Lagos la haya corregido, cambiado y firmado. Quieren un cambio total, quieren partir de cero y me temo -si lo logran- volverán a redactar un texto que con el paso del tiempo volverá a transformar a Chile en el país mediocre que tan pocas oportunidades le dio a nuestros ciudadanos durante las décadas en que la izquierda nos gobernó.
Julio Dittborn Cordua