Amparo Noguera lidera comedia negra sobre La Araucana y el mundo de la actuación
La actriz filmó en diciembre la película junto a un elenco que incluye a Catalina Saavedra y Pablo Schwarz. La historia aborda desde el texto de Alonso de Ercilla hasta la inmigración.
Algo inquieta a Gioconda Martínez. Actriz con exitoso pasado en la televisión, celebrada por su humor picaresco e ingenuo en una teleserie noventera, ahora parece desencajada en el presente de Santiago. Tanto, que ocupa un viaje a su natal San Felipe como excusa para dar un giro radical en su carrera.
Allí, a dos horas de la capital, donde es lo más parecido a una estrella local, busca reinventarse embarcándose en la adaptación de La Araucana, de Alonso de Ercilla, junto al grupo de teatro del centro cultural de la ciudad.
“Es una comedia sobre una mujer intentando borrar un pasado”, señala el director Bernardo Quesney sobre su tercer largometraje, Historia y Geografía, para luego ilustrar el conflicto con su hermana Atenea, ambas encarnadas por Amparo Noguera y Catalina Saavedra: “Son dos polos, una viene desde el entretenimiento y otra siempre ha representado una cultura de resistencia en la zona. Toda la película son estas dos fuerzas”.
Inicialmente programada para comenzar su rodaje en abril, la cinta del director de Desastres naturales (2014) y Efectos especiales (2011) se adaptó a la pandemia y se terminó filmando en diciembre en San Felipe, con un elenco que también incluye a Pablo Schwarz, Naldy Hernández y el haitiano Steevens Benjamin (Perro bomba). La producción a cargo de la productora Equeco (La mentirita blanca) también semejó un ejercicio de resistencia, con un equipo reducido y tiempos más extensos para terminar la filmación.
Aunque sumaba una ventaja no menor en un momento de adversidad para el medio audiovisual: el director es oriundo de San Felipe y ya había realizado un trabajo previo con actores no profesionales que también son parte del elenco.
Pero en su centro el filme – escrito por Quesney junto al guionista Simón Soto– siguió siendo una fotografía del errático camino de su protagonista, decidida a encabezar a un grupo que adapta la obra de Ercilla y además se pone a sí misma
en el rol de Pedro de Valdivia.
“Estamos en un momento en que cosas que hace diez años daban risa, ya no dan risa, y la película también juega con ese ejercicio. La protagonista es conocida por su humor estilo Morandé con Compañía, y ya no pega con el público. En su afán de reinventarse, toma aún más malas decisiones utilizando este relato mítico y hablando sobre pueblos originarios, más que sin
respeto, sin estudios”, detalla Quesney, añadiendo: “La idea es cómo este taller analiza y revisita un texto y hay diferentes visiones sobre el mundo mapuche desde la lejanía de San Felipe”.
Durante el rodaje el realizador buscó la improvisación en gran parte de las escenas, en particular con el personaje principal. “A mí me daban mucho miedo todas las escenas, porque hacer comedia es difícil. Trataba de concentrarme en esa situación y no pensar en el resultado de las escenas. Si me decían: tienes que ser Pedro de Valdivia, yo iba a tratar de actuar con acento español, como a mi mejor me pueda salir”, apunta Noguera.
Entre reflexiones sobre la inmigración, la identidad y la historia, se filtra la comedia de Quesney, también director de una treintena de videoclips de bandas como Denver y Javiera Mena. “Es una comedia negra de mucha profundidad acerca de su país y de su gente. Es una película muy graciosa pero súper dura, pega unas críticas tremendamente verdaderas y contundentes”, señala la actriz.
Aún sin fecha de estreno, la película tendrá todo 2021 para su postproducción. “Estamos todos sanos y hay una película, algo que de verdad todavía me cuesta creerlo. En julio no tenía idea cuándo se iba a hacer”, cierra el director. ●