Asunción de Biden: Washington se prepara para lo peor
En el corazón de Washington se escucha por todos lados el ruido de montacargas que deposita más vallas. No se ven autos ni motos, y casi no hay turistas. La zona que concentra los edificios del gobierno es visible solo a través de altas vallas negras.
El FBI dijo que violentos partidarios de Trump planean manifestaciones de protesta en las capitales de los 50 estados y en Washington en la semana previa a la asunción de Biden.
Entre la pandemia y los problemas de seguridad, la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, le está pidiendo a la gente que no vaya a Washington para la ceremonia inaugural. También solicitó que se adelantase al 13 de enero la entrada en vigor de las medidas de seguridad que se toman para eventos grandes.
Vehículos policiales cortaron el paso a amplios sectores del centro de Washington el miércoles, generando congestionamientos de tráfico. Bowser dijo que de ahora hasta la inauguración, todo vehículo puede ser detenido y sus ocupantes
interrogados. A partir del viernes, se prohibirá el acceso a los estacionamientos de la zona a menos que se tenga una autorización especial. Bowser también está siendo presionada para negar alojamiento a manifestantes potencialmente violentos.
En el terreno, buena parte de la seguridad visible provendrá de los más de 15.000 efectivos de la Guardia Nacional llegados de otros estados, algunos de ellos armados. Según las autoridades, la cantidad
de guardias que portará armas será limitada. En términos generales, no obstante, los soldados podrán usar fuerza letal para proteger las vidas de otros y la suya propia. Las autoridades dijeron que si bien por ahora solo 15.000 guardias nacionales fueron activados, podrían venir más en los próximos días. El jefe de la policía de Washington, Robert Contee, calcula que el día de la asunción de Biden habrá unos 20.000 guardias movilizados en la ciudad.