Combina quimioterapias y dirigir un colegio en Puerto Varas
“Cuando el colegio estaba sin niños, era muy frío, ahora está lleno de alegría y de vida. Yo gozo con los alumnos”.
Todos los días, sor Victorina Colla (78) llega a las 8 AM al Colegio Bicentenario Felmer Niklitschtek, de Puerto Varas, Región de los Lagos, del que es directora hace 12 años. Las mañanas comienzan con tareas administrativas, pero cada 20 días debe ausentarse por dos horas y media para realizarse una quimioterapia. Hace cinco años que pelea contra un cáncer de mamas.
Luego del tratamiento, vuelve al recinto para la jornada de la tarde. Dice que, pese a las circunstancias, “estoy feliz y tengo que luchar para que los niños puedan volver a tener sus clases”. De nacionalidad italiana, Colla pertenece a la Congregación de Religiosas Franciscanas Misioneras del Sagrado Corazón desde los 20 años. Dice que nadie la obligó y que nunca se ha arrepentido de su decisión de dedicarse a la vocación misionera.
Llegó a Chile en la década del 60 y hace más de 50 años que trabaja en este recinto educativo. Con la salida de la ciudad de la cuarentena que tuvo durante el verano, desde marzo los 1.423 estudiantes, de prekínder a cuarto medio, asisten al colegio ininterrumpidamente, en turnos separados y con los protocolos sanitarios requeridos.
Durante el 2020, gracias a un subsidio del Mineduc, el colegio les entregó a más de 200 alumnos computadores y módem con internet para que se conectaran. “Sobre el 80% de nuestros estudiantes son de familias vulnerables”, relata.
Hasta la fecha no han tenido brotes: los casos de contagios han sido previamente avisados al colegio y se mantienen en aislamiento en sus casas. “He visto buena asistencia de los alumnos (...) los niños y sus familias están felices”, dice.