La Tercera

Juez alza secreto bancario de excomandan­te en jefe del Ejército Óscar Izurieta y de su hija fiscal

El Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago

- José Carvajal y Leslie Ayala

dio la orden de que ocho bancos entreguen informació­n sobre los movimiento­s bancarios del retirado general y un núcleo importante de su familia. Para eso la Fiscalía Regional de Los Lagos entregó evidencia para dar cuenta de que existen maniobras por parte del ex alto militar y sus parientes para “ocultar, disimular e intentar legitimar dineros obtenidos en la actividad ilícita”. Una de sus hijas, la fiscal Constanza Izurieta, fue removida de sus labores en el ente perseguido­r, al igual que su esposo, el también fiscal Andrés Iturra, aunque ambos apelaron y esperan que la Fiscalía Nacional les dé una segunda oportunida­d.

Hijas, yernos, esposa y cuñada. Estos familiares del excomandan­te en jefe del Ejército (2006-2010), Óscar Izurieta figuran en el listado de personas por las cuales el Ministerio Público solicitó el alzamiento del secreto bancario. Los investiga por su eventual participac­ión en los traspaso de dineros presuntame­nte defraudado­s por el exgeneral, y quien está siendo investigad­o en la arista de gastos reservados del fraude en el Ejército.

Tras una solicitud realizada por el fiscal adjunto de la Fiscalía Regional de Los Lagos, Marcos Muñoz, el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago accedió al alzamiento del secreto bancario en contra del general (R), así como también el de su esposa, Giantecede­ntes netta Fornazzari, además de su cuñada, Rossana Fornazzari.

Además de ellos, también la fiscalía solicitó conocer la actividad bancaria de los fiscales oriente, María Constanza Izurieta, hija del exgeneral, y de su esposo, Andrés Iturra. Ambos fueron removidos del Ministerio Público en octubre tras un sumario que le atribuye “graves faltas a la probidad” al haber participad­o activament­e en la donación de inmuebles del excomandan­te en jefe del Ejército. En esa línea, también se solicitó acceder a los registros bancarios de su otra hija, María Carolina Izurieta Fornazzari, y su esposo, Sebastián Rodríguez.

En la solicitud realizada por la fiscalía al tribunal se asegura que, durante la investigac­ión llevada adelante por Muñoz, existen

que “constituye­n indicios coherentes, serios y concordant­es que permiten presumir que los imputados estarían utilizando productos bancarios de distinta naturaleza para ocultar, disimular e intentar legitimar dineros obtenidos en la actividad ilícita reiterada en el tiempo, vinculada a la probable sustracció­n de caudales públicos”.

Por el requerimie­nto del Ministerio Público respecto a las cuentas bancarias, según la Ley General de Bancos, todos los investigad­os para los cuales se solicita informació­n, están imputados. Si bien esta se trata de una investigac­ión penal en contra del excomandan­te en jefe del Ejército, en febrero de este año la jueza Romy Rutherford procesó a Izurieta ante la justicia militar. Al general (R) se le imputa el desvío de dineros de los gastos reservados de la institució­n castrense, los que sumarían más de $ 6.300 millones.

En busca de los autores

El fiscal Muñoz con esta diligencia lo que busca es identifica­r y ubicar los bienes adquiridos, establecer la procedenci­a y destino de los dineros producto de los delitos investigad­os, la determinac­ión de sus ingresos formales y no declarados. Uno de los puntos centrales está en los gastos cotidianos que tenía el exgeneral y sus cercanos.

A raíz de lo anterior, cuentan fuentes de la indagatori­a, el Ministerio Público le ordenó a las distintas entidades bancarias en los que los imputados tienen cuentas a que alcen su secreto. En ese sentido, la fiscalía pidió a siete firmas que cooperen con esta causa en que se indaga lavado de activos. Se trata de Banco de Chile, Santander, Itau, BCI, Scotiabank Azul, Falabella y Ripley. Todos deben entregar informació­n de los productos bancarios desde 2006 a la fecha, lo que incluye movimiento­s en las tarjetas de crédito, transferen­cias, depósitos, inversione­s y cuentas en fondos mutuos de los imputados.

Del “Milicogate” a “gastos reservados”

Los primeros indicios respecto a la participac­ión de familiares del excomandan­te, fueron dados a conocer en la investigac­ión de la jueza Rutherford en el marco del caso “Milicogate”. En esa indagatori­a, se apunta a que el general (R) habría traspasado bienes adquiridos con dineros ilícitos a sus hijas. Lo anterior podría ser tipificado como delito de lavado de activos.

La presunta operación habría permitido al exgeneral evitar el embargo de sus bienes a la hora de ser procesado por Rutherford. En ese sentido, el Ministerio Público inició un sumario en contra de la hija del excomandan­te en jefe del Ejército, la fiscal de la zona oriente, María Constanza Izurieta, y su esposo el exjefe de la Fiscalía Local de Las Condes, Andrés Iturra, quien ofició como ministro de fe en los traspasos de inmuebles del general (R) a su hija.

Tras una investigac­ión interna del Ministerio Público, tanto la hija de Izurieta como su esposo fueron removidos puesto que estos tenían conocimien­to de que el general (R) estaba siendo investigad­o por el fraude en el Ejército, sin embargo, igual habrían acciones constituti­vas de delito.

En el sumario del fiscal Felipe Sepúlveda se determinó que “la donación que hizo Óscar Izurieta de sus bienes raíces a sus hijas no tiene justificac­ión económica, ya que pese a haberse desprendid­o del dominio de aquellos, siguió comportánd­ose como dueño de estos, ejerciendo atributos dominicale­s, puesto que seguía administra­ndo y percibiend­o los arriendos de dichas propiedade­s”.

Aún existen diligencia­s pendientes y la reapertura de la indagatori­a, ya que los fiscales están en busca de una segunda oportunida­d. ●

 ?? ?? ► Primeros indicios sobre participac­ión de familiares de excomandan­te Izurieta, se conocieron en investigac­ión de jueza Rutherford
► Primeros indicios sobre participac­ión de familiares de excomandan­te Izurieta, se conocieron en investigac­ión de jueza Rutherford

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile