Los descargos de Comunes ante el Tricel para evitar su disolución
La colectividad presentó este jueves su defensa contrariando la postura expuesta por el Servicio Electoral.
Faltaban 18 minutos para las 11.00 de este jueves cuando Comunes presentó sus descargos ante el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel). Esto mediante un documento de 114 páginas, con el que buscan evitar la disolución de la colectividad solicitada por el Servicio Electoral (Servel) en diciembre del 2023, por “infracciones graves y reiteradas” en los balances del partido.
El escrito ingresó el mismo día en que el partido que preside Marco Velarde recibió una respuesta del Servel al oficio que presentaron para saber si, en caso de que se concrete la disolución, los candidatos de Comunes serían o no afectados por la ley antidíscolos de cara a los comicios municipales y de gobernadores de octubre. La contestación del ente electoral fue favorable a la tienda frenteamplista -a contrapelo de lo que había advertido Andrés Tagle, timonel del organismo-, lo que fue festejado por la directiva y militancia.
En el escrito al Tricel, Comunes apunta a que la responsabilidad de la crisis financiera que hoy los tiene enfrentando la disolución recae principalmente en militantes que hoy han sido expulsados de la colectividad, particularmente en la directiva que presidió Jorge Ramírez, quien es individualizado en 11 ocasiones en el documento y cuyos balances económicos no fueron aprobados por el ente electoral.
Ramírez encabezó la tienda cuando estalló el escándalo por el financiamiento de la campaña a gobernadora de la Región Metropolitana de su expareja Karina Oliva, quien es mencionada en cuatro oportunidades. “Sabemos que Comunes ha tenido desórdenes financieros, sabemos también que esos desórdenes provienen en gran parte de las labores de una directiva que ya no está en ejercicio. (...). La actual directiva lleva un par de años haciendo
un gran esfuerzo para ordenar financieramente el partido para efectos de cumplir a cabalidad con las exigencias legales”, dice el documento, cuya gestión legal fue patrocinada por el estudio “Sarmiento y Walker Abogados” (de Claudia Sarmiento y Elisa Walker), en el que trabajan los defensores William García y Sebastián Winter.
En el escrito, Comunes expone las medidas que han debido tomar para hacer frente a la crisis -como la querella que presentaron en diciembre contra la extesorera Camila Ríos-, pero también apuntan contra el Servel, organismo que busca su disolución.
Además, el partido de Marco Velarde plantea en su defensa que necesitaban más tiempo para poder solventar la crisis financiera de la colectividad: “Todo este esfuerzo de ordenar los balances del Partido Comunes requiere de tiempo y dedicación. El Servel sabe que estos problemas no se corrigen de la noche a la mañana y que los problemas
de gestión financiera de la directiva anterior siguen generando efectos en la actualidad. Lo que nosotros pedimos es tener ese tiempo para enmendar las labores financieras”.
Con esto de fondo, la defensa que expuso Comunes ante el Tricel también se centra en otros tres fundamentos. El primero es que “la denuncia no describe infracciones específicas y no fundamenta el porqué estas serían graves y reiteradas en el tiempo”, agregando que “no basta afirmarlo (en la denuncia del Servel)”, y que “esta denuncia no cumple con los requisitos de cualquier solicitud de intervención judicial”.
El segundo es que “la denuncia se basa en hechos sobre los que existen procesos administrativos en curso ante el Servel”, mientras que en tercer lugar sostienen que “la disolución de un partido político es una medida de última ratio”, dado que “implica la desaparición de este del sistema político. ●