Dilema recoletano: pagar o no por estacionar en la calle
Empresa volverá a cobrar hoy por los parquímetros, pero el alcalde Daniel Jadue llama a los conductores a no cancelar porque el contrato ya expiró
Un fallo judicial a favor de la empresa Concesionaria Recoleta, de fecha 22 de junio del año en curso, parece ser la mecha que amenaza con encender el conflicto en la populosa comuna del sector norte de la capital.
Desde este viernes, los parquímetros que funcionan en los espacios públicos de la comuna, retomarán el cobro a los vehículos de los vecinos y visitantes de ese sector de intensa actividad comercial de Santiago.
Unos pequeños carteles de color azul han “notificado” a los ciudadanos sobre la entrada en vigencia de la sentencia.
En ellos se puede leer lo siguiente: “La Corte de Apelaciones de Santiago concedió de fecha 22 de julio de
2017, una orden de No Innovar (...) que restablece el sistema de parquímetros concesionados, que se informa que a partir del día viernes
14 de julio de 2017, comenzará a operar nuevamente el sistema de parquímetros con las tarifas actualmente vigentes”.
En su cuenta de Twitter, la municipalidad de Recoleta dio a conocer el siguiente comunicado, en torno a la medida de la empresa, considerada unilateral por la autoridad comunal.
“En lo que atañe a la medida de No Innovar, la Municipalidad de Recoleta seguirá ejerciendo todos los recursos judiciales que el ordenamiento jurídico le provee, para resguardar y defender los intereses de la comunidad que representa y sus visitantes, ya que tenemos la firme convicción que estos estacionamientos deben ser de uso libre”, expresa la declaración.
“Llamo a los vecinos a no pagar. La municipalidad que represento no tiene contrato vigente con esa empresa. Para que haya una multa, debe estar la presencia de un inspector de nuestra institución y no lo habrá porque no hay nada que fiscalizar”, comentó el alcalde Daniel Jadue.
En el pasado mes de mayo, la empresa anunció que se retiraba de manera temporal, ya que algunos de sus empleados habían sido agredidos por usuarios que se niegan a pagar la tarifa, consistente de 548 pesos por los primeros treinta minutos para estacionar un vehículo junto a las aceras de Recoleta.
En ese contexto contradictorio, los vecinos y visitantes se debatirán durante esta jornada entre cancelar lo que marque el parquímetro o simplemente negarse de manera rotunda y definitiva a la solicitud de los funcionarios de la empresa que reclama mantener un contrato vigente con las autoridades de la comuna.