Nicaragua a las puertas de una guerra civil: 137 muertos, barricadas y morteros frente a las balas
Las manifestaciones en Nicaragua se iniciaron el 18 de abril contra una reforma al Seguro Social que incrementaba lo que debían aportar quienes cotizaban, pero se han convertido en un reclamo para que el presidente Daniel Ortega deje el poder.
Ante la brutal represión de los grupos parapoliciales del presidente Daniel Ortega, acusados de desencadenar una violencia mortal contra los opositores, los manifestantes se defienden con barricadas y morteros.
La demanda de estos proyectiles improvisados se ha disparado en las últimas semanas.
En talleres clandestinos mezclan a mano las bombas de mortero, una combinación de clorato de potasio con carbono, azufre, aluminio y un poco de arena para darles peso.
“Hemos visto nuevas formas represivas en el país”, dijo el secretario ejecutivo Paulo Abráo.
Pero las protestas persisten. El último informe del organismo no gubernamental Centro Nicaragüense de Derechos Humanos actualizó en más de 137 el número de muertos debido a las manifestaciones y la represión gubernamental. Además cifra en más de un millar los heridos y en más de 500 los detenidos. El gobierno sólo reconoce 42 muertos.
La mayoría de las víctimas fatales son varones y jóvenes, todos con heridas de bala de alto calibre en la cabeza, cuello o torso: el Cenidh asocia la forma de morir con la acción de disparos de francotiradores.
En Masaya, a 30 kilómetros de Managua, la capital de Nicaragua, hay barricadas en cada barrio, hechas con adoquines, piedras canteras, láminas de zinc, rótulos de metal y sacos con arena. Los habitantes dicen que así se protegen de la balas.
Las trincheras empezaron en el barrio indígena de Monimbó, al sur de la ciudad, y se extendieron hasta los barrios San Jerónimo y San Carlos en la parte norte.
Después, brotaron en toda la ciudad y sus alrededores, para impedir que el Gobierno enviara refuerzos a la Policía.
“Hemos visto nuevas formas represivas en el país” Paulo Abráo, secretario ejecutivo en el país