Por qué hacer ejercicio en el trabajo es positivo
El aumento generalizado del estrés en las empresas, las ausencias laborales por licencias médicas, el cansancio y la poca productividad, son síntomas cada vez más recurrentes en los espacios de trabajo. Sin embargo, según expertos esto se podría revertir con la ayuda del ejercicio diario.
Para Marcelo Pinto, sicólogo organizacional y entrenador de HPI, adoptar un estilo de vida activo en el trabajo trae una serie de beneficios. “Se experimenta una mayor capacidad laboral y de concentración, se logra conciliar el sueño y la vigilia; y por ende entrega mayor bienestar físico y mental”, explicó
Según el especialista, lo anterior se justifica dado que “la actividad física previene y contribuye al tratamiento de una amplia variedad de enfermedades profesionales relacionadas con el modo de vida”, añadió.
Por otro lado, para Gustavo Oliveros, gerente de Administración y Finanzas de GL Capacita, la solución no basta con el simple hecho de hacer ejercicios en el trabajo, sino en cómo realizarlo al interior de cada entidad. “Existen diferentes formas de abordar este tema, pero lo principal es diseñar los ejercicios o programas de bienestar en base a la función que desempeña cada trabajador”, manifestó. Es el requisito de siempre. Entrar al mundo laboral es todo un reto, sobre todo para los nuevos profesionales recién egresados y que están en búsqueda de su primer empleo.
En la actualidad las empresas no sólo prestan atención al título o grado académico de los profesionales, sino que también privilegian los años de experiencia, especialmente si se trata de un área especializada.
Según Michael Page, consultora de reclutamiento, un 65% de las compañías privilegian profesionales que tengan, al menos, 3 a 5 años de experiencia. Esto se debe a que contratar a alguien que nunca ha trabajado conlleva un riesgo, porque los empleadores deben invertir tiempo y recursos en entrenarlos y formarlos para las tareas que asumirán, además que deben pasar por todo el proceso de adaptación que implica en una empresa.
“Muchas empresas creen que contratar a alguien sin experiencia implica un riesgo mayor que tener a alguien con mayor ‘expertise’, ya que en varios casos existe la posibilidad que todo el tiempo y los recursos invertidos en este candidato sean en vano y no se logre formar al profesional de la forma en que se desea”, explicó Pamela González, executive manager de Michael Page.
En la mayoría de los casos, principalmente en las industrias más específicas, como minería, ingeniería y construcción prefieren ahorrar tiempo y contar con alguien de más de tres años de experiencia y familiarizado con el área.
La experta comentó que, por lo general, aquellos que llevan años en el mercado laboral ya tienen algunas habilidades o destrezas necesarias para las distintas industrias, tales como orden, responsabilidad, proactividad, entre otros, por lo que tienen esa ventaja frente a nuevos candidatos. Pero a no desanimarse. De todas formas, en Michael Page indicaron que tener experiencia no es lo único en lo que se fijan las empresas. Tener estudios extras que certifiquen la especia- lización en un área ayudan a estar un paso adelante de los competidores, así se aumentan las posibilidades de conseguir el trabajo al que se está postulando.
Para aquellos que no tienen experiencia, contar con prácticas previas, ya sean profesionales o voluntarias y ojalá en el mismo sector a la empresa que se está postulando, ya que esto demuestra interés en el área.
También recomiendan tener conocimientos extras, como por ejemplo, realizar cursos externos a la universidad, ya que manifiesta proactividad y ganas de aprender. También es bienvenido hablar otros idiomas y tener certificados que lo declaren, ya que varias empresas privilegian a quienes hablan una segunda lengua.