El sonido cambió de un día para otro
Éxitos y regalos
Laferte dio inicio a su regreso tras su set de 2017 al Festival con “Tormento”, “Mi buen amor” y “Amor completo”, y rápidamente se ganó al público, consiguiendo que cantaran sus canciones, además de decir “Ídola, ídola”, además de pedir gaviota desde el segundo tema.. Fue un éxito, con un repertorio que encantó (aunque llegó menos público que el domingo). Mon Laferte conpartió con cuequeras de la V región y con Francisca Valenzuela, quien debía cerrar la jornada. Tras recibir las gaviotas y escuchar al público pidiendo la de platino, la cantante hizo un anuncio. “Como símbolo de que Chile está en un momento muy especial, un momento difícil, a modo significativo yo voy a entregar mis premios. Yo no quería venir a celebrar un festival. Se las voy a dar a alguien que necesite, alguna fundación, si la quieren rifar, alguna cosa”, dijo.
La noche de los pañuelos verdes
Anoche fue la noche femenina, con Mon Laferte, Javiera Acevedo y Francisca Valenzuela. Los pañuelos verdes marcaron la jornada, además de otros símbolos y carteles, mucho más que la primera jornada.
La risa de Pancho Saavedra versus 15 mil personas
Para el sonidista Mauricio Castañeda, uno de los momentos más extraños fue cuando sólo se escuchaba la risa de Francisco Saavedra. “En la transmisión se logró apreciar que el staff agregó uno de los micrófonos apuntándolo a él (...) Pienso que fue a propósito”.