Entre el fútbol y su imperio empresarial

Gerard Piqué maneja los negocios mejor que la pelota y, ya cerca del retiro en España, acumula una megafortuna gracias a inversiones diversas: desde inmobiliarias hasta la Copa Davis.

a agitada vida de Gerard Piqué está vinculada entre sus 10 años y los actuales 34 al club Barcelona, aunque su debut fue en el Manchester United y luego jugó en el Real Zaragoza antes de enrielar las últimas catorce temporadas en el equipo catalán y la selección española. Sin embargo, la figura del jugador trasciende largamente como un exitoso hombre de empresas, que devino en una próspera compañía en sí mismo. Con una fortuna largamente consolidada, el futbolista hoy estira su pasión deportiva hasta el límite, mientras sus mayores energías se enfocan en los negocios que copan su intensa agenda al margen de la cancha y los viajes. Piqué se mueve hoy en el escenario refulgente de las inversiones millonarias y su masin yor golpe del último tiempo fue convertirse en el nuevo “emperador” de la Copa Davis de tenis, adjudicándose su organización a través de un nuevo formato mas atractivo y lucrativo.

Su movida más reciente, embargo, es un ejemplo de olfato comercial: apenas consumado el paso de su excompañero Lionel Messi al PSG, Piqué obtuvo los derechos televisivos de retransmisión de la liga francesa.

Previamente, el marido de la cantante Shakira ya manejaba Kerad Project 2006 SL, una inmobiliaria dedicada a la compraventa de casas, terrenos y complejos industriales en diferentes ciudades españolas. Y también puso millones en la compra del club FC Andorra en 2018 por medio de su holding Kosmos. Su última inversión llevó a Piqué al llamado Fútbol Fantasy: “Soy fan de los cromos (figuritas) de futbolistas desde niño. El próximo paso es el intercambio por vía digital, a través de las nuevas tecnologías”, explicó.

El juego permite que los participantes armen un equipo de fútbol virtual con jugadores reales y cuyos resultados se adaptan a la actuación de los cracks en los partidos de sus ligas. La apuesta de Piqué en el negocio del Fantasy se rubricó por tres millones de euros aportados por el futbolista catalán y un fondo de la Coca Cola.

Y, claro, el oportunismo es su virtud: con Kosmos produjo el documental con que Antoine Griezmann anunció su decisión de partir en el Atlético de Madrid, demostrando que en el vestuario catalán brotan grandes negocios. A Piqué lo secundan su padre Jan y su hermano Marc, que son su verdadero “equipo” en el imperio millonario -como lo graficó la revista Forbes- que fue capaz de levantar cuando la pelota deja de rodar en el césped...

Daniel Pérez Pavez