¿Cuál es el mejor sistema de calefacción para tu hogar?
Son varios aspectos que se deben considerar cuando buscas lo más adecuado para alejar el frío de este invierno de tu hogar. El valor del calefactor y el gasto que implica son factores relevantes a la hora de decidir.
Está claro que no existe el sistema de calefacción que sea el ideal para toda clase de vivienda. Las características de tu hogar, el precio, el gasto que implica y tus posibilidades financieras son clave a la hora de decidir cuál es el que más te conviene.
Lo primero que tienes que tener en cuenta son estos cuatro factores: el aislamiento de tu hogar, porque una casa o departamento bien aislado consume menos energía en calefacción; el clima es relevante, porque depende de los meses que dure el invierno y las temperaturas actuales; el precio y la disponibilidad del producto, y la instalación y el mantenimiento.
Hay un sistema de muy buen resultado, pero de alto costo, aunque menor que los de aerotermia y geotermia: las calderas a gas con radiadores y piso radiante. Consume cerca del 30% menos y geLa neran pocas emisiones contaminantes. El problema es que necesita conexión a una red de gas natural.
Luego tenemos las estufas de pellet, que es un combustible con gran poder calorífico y en muchas ciudades de nuestro país, como Coyhaique por ejemplo, está reemplazando al uso de la leña. Hay estufas para el dormitorio, para varias habitaciones y hasta para calentar toda la casa. Tienen varias ventajas,
baja contaminación, ahorro en el consumo y sólo hay que preocuparse de tener un lugar donde almacenar los pellets.
Otro sistema son las estufas de bioetanol, que es un combustible líquido, generan calor muy rápido y contaminan poco, pero sólo calientan espacios pequeños.
Aunque apenas generan C02 en la combustión, es necesario ventilar el espacio cada dos horas aproximadamente.
Ahora, si quieres calentar toda la casa, los emisores eléctricos inteligentes son muy convenientes. Hay de tres tipos: secos, de fluido y cerámicos. Los secos alcanzan la temperatura más rápidamente, pero la conservan durante menos tiempo. Los cerámicos tardan más en calentar, pero conservan mejor el calor cuando ya no consumen electricidad. Y los de fluido se encuentran en un punto intermedio. Y, vaya novedad, los puedes controlar con tu celular, porque tienen conexión a wifi. Claro que su costo es mayor que otros sistemas.