El rol de Franco Parisi y una dependencia mutua
El PDG nace bajo el manto del excandidato presidencial, quien es su líder, aunque sin un cargo formal. ¿Seguirá así?
El PDG vio la luz bajo el liderazgo del excandidato presidencial Franco Parisi, que aún mantiene esa función, aunque sin cargo, desde Estados Unidos, donde reside. Desde allá, tal como en la campaña, participa de su programa web Bad Boys, junto a sus aliados Giancarlo Barbagelata y Pedro Gubernatti.
La jefa de bancada del PDG, Yovana Ahumada, asegura que Parisi no tiene injerencia en cómo votan los parlamentarios. “No la tiene. Hemos actuado siempre a conciencia y en cosas que son importantes, hemos hecho consultas vía democracia digital. Aunque en temas importantes no hemos sido escuchados”, comenta.
El asunto es que la crisis de su partido está afectando a Franco Parisi, en el supuesto de que quiera volver a postularse a la presidencia (fue tercero en la primera vuelta de 2021). Mauricio Morales, cientista de la UTalca, piensa que “Parisi queda debilitado, porque tempranamente el partido se dividió, sin cohesión legislativa, es decir, no se une en función de principios ni tiene disciplina. No tiene un liderazgo capaz de cuadrar a sus diputados hacia una decisión política. Esto perjudica su intención de llegar a La Moneda, porque si no es capaz de organizar un partido que actúe de manera seria y contundente, difícilmente podría hacerlo con el país”.
Tal vez esté pensando en dividir caminos. “Parisi necesita visibilidad y un partido lo da, y una base militante que se puede articular, sobre todo si tiene representación parlamentaria. La pregunta es ¿el partido lo necesita? Creo que podría llegar un momento en que no, en que se convertiría en una piedra en el zapato, salvo que el PDG se reduzca tanto, que termine siendo un partido chico, títere de su voluntad”, explica Nicolás Freire, cientista de la Universidad Central.