Las universidades siguen esperando para iniciar el año
UC y la “U” aguardan la decisión de la Delegación Presidencial Metropolitana para el fin de semana.
El Campeonato Nacional no termina de tomar color. Luego del deslucido arranque del torneo, con tres partidos reprogramados, la segunda fecha no asoma mucho mejor, con las universidades de Chile y Católica aún a la espera de la autorización de la Delegación Presidencial para los partidos que deben afrontar como locales este fin de semana.
Mientras la UC espera desde el pasado miércoles la venia para comenzar la venta de entradas para el juego del viernes, cuando debe recibir a Ñublense, los “azules” siguen en su intento por poder jugar de locales, luego del fallido intento del domingo ante Cobresal.
Ayer, la vicepresidenta de Azul Azul, Cecilia Pérez, y el gerente general de la concesionaria, Ignacio Asenjo, llegaron hasta el Estadio Nacional, para sostener una nueva ronda de reuniones con los responsables de las entidades
vinculadas a que la “U” pueda ser anfitriona en el coliseo ñuñoíno. Así, con representantes de la Delegación Presidencial de la Región Metropilitana, Estadio Seguro, Carabineros, el Instituto Nacional del Deporte, Metro y la Municipalidad de Ñuñoa, insistieron en la posibilidad de tener un retorno al recinto con 43 mil
espectadores en las tribunas.
Sin embargo, ese aforo ante Audax Italiano, el sábado, sufrió un rápido revés. Pese a mostrar toda la disposición de cumplir con todas las exigencias que le hagan para poder contar con esa cantidad de público en las galerías, Carabineros le anticipó que no hay contingente disponible para
poder cubrir tal necesidad, adelantando que sólo podrán tener 30 mil localidades disponibles.
Además, las autoridades sugirieron otra medida relevante, la que rápidamente fue oficializada por la Anfp. El duelo ante los “itálicos”, programado originalmente para las 20.30 horas, fue adelantado
a las 18.00 horas, siguiendo las exigencias de seguridad.
El problema, eso sí, es que con el adelantamiento del horario del partido, se enreda todo.
A la misma hora, en La Cisterna, está fijado el partido entre Palestino y Cobreloa. Y, como si eso fuera poco, en San Bernardo, Magallanes y Rangers se estrenan en el torneo de ascenso, con lo que habría tres juegos en simultáneo en la capital, con la sospecha de que las fuerzas de orden y seguridad no den abasto, considerando las contingencias en la Región de Valparaíso y el inminente inicio del Festival de Viña del Mar.
Por ahora, pese a la voluntad de los clubes, la programación sigue en vilo, en manos de la Delegación Presidencial Metropolitana.