¿Por qué nos cuesta tanto ahorrar?
A través del ahorro, una acción que es fundamental, las personas pueden surgir, crecer, desarrollarse y proyectarse hacia el futuro.
LUEGO DE la reciente visita a Chile de Dan Ariely, el destacado profesor estadounidense de Economía de la Universidad de Duke, en el marco de su gira internacional por Latinoamérica, denominada “Predectiblemente irracionales: la psicología del dinero”, vale la pena volver a plantearse la interrogante que él intentó responder en su charla y en algunos de sus recientes libros: ¿por qué nos cuesta tanto ahorrar?
Desde la mirada de la economía conductual que él ha desarrollado -en la cual las personas somos susceptibles a las influencias del contexto y de las emociones-, la idea de que no estamos ahorrando lo suficiente se explica, en parte, debido a que aplazamos nuestras decisiones, principalmente porque nos cuesta entender los beneficios de ahorrar en el tiempo y no vemos el costo real de no hacerlo.
¿Y por qué es importante comprender la psicología detrás del dinero y reconocernos predeciblemente irracionales? Porque ayuda a tomar conciencia, a entendernos mejor, a retomar el control. Tomar conciencia muchas veces es el paso necesario para lograr cambios en el tiempo, cambios favorables que nos ayuden a alcanzar un futuro mejor.
Cuando decidimos ahorrar, explica Ariely, estamos “en estado frío”. En cambio, cuando vemos un auto o un par de zapatos estamos “en estado intenso”. Por eso es tan importante, antes de tomar decisiones financieras relevantes, detenerse un momento para entender el estado emocional en el que estamos. En ese estado intenso, generalmente tendemos a dejar de lado nuestros objetivos de largo plazo para obtener una satisfacción inmediata y, por lo tanto, ante la tentación, dilatamos esa decisión financiera que habíamos tomado inicialmente.
“La postergación afecta nuestras finanzas personales y en particular nuestros ahorros, al caer en la tentación de llenar nuestros clósets con cosas que no necesitamos”, comenta Ariely. Resistir a las tentaciones y ejercer autocontrol es difícil, y especialmente cuando no tenemos mayores compromisos, es más fácil caer en la tentación.
Esto se ve potenciado por un sistema basado en el consumo y la satisfacción inmediata. “¿Cuántas empresas hay pensando en el beneficio de largo plazo de ustedes?”, nos preguntó en la conferencia.
EL PRINCIPAL compromiso de SURA Asset Management es ayudar a nuestros clientes a ahorrar más, y que de esa manera alcancen el futuro con que sueñan.
Hoy existen diversas herramientas y mecanismos que ayudan a las personas a ahorrar, con el fin de sortear las tentaciones y esta intensa necesidad de lograr sentir satisfacción inmediata.
Compartimos con Ariely que ahorrar para el futuro significa renunciar a algo concreto en el presente. Sabemos que el futuro está lejos y es abstracto, y que, por lo tanto, a las personas se les hace menos atractivo ahorrar, cuando deben dejar algo concreto por algo abstracto, que es el futuro.
Pero cuando las personas no ahorran para su futuro, esto tarde o temprano será un costo para su familia y para toda la sociedad. Por ello es tan importante que las personas acepten esa irracionalidad y la incorporen como una variable clave al momento de tomar decisiones.
Definitivamente, tenemos que ahorrar más y por más tiempo. A través del ahorro las personas pueden surgir, crecer, desarrollarse y proyectarse hacia el futuro. El ahorro es fundamental, especialmente cuando nos enfrentamos a situaciones económicas más moderadas o inciertas.
El mismo Ariely recomienda incorporar mecanismos simples, como reglas sencillas, que nos permitan mantenerlas en el tiempo, de manera de tener nuestros objetivos en mente y lograr la disciplina necesaria para materializarlos. Sabemos que no es sencillo incorporar un hábito, pero cuando se logra, permanece en el tiempo y se perciben los resultados. Y ahorrar vale la pena, cuando se ha llegado a ese futuro y se cuenta con el ahorro para materializar esos sueños, para lograr tranquilos lo que cada uno se ha propuesto.