Inversión para desarrollo digital,
ENFRENTAMOS una revolución industrial digital, Internet de las Cosas (IoT). Pasamos a una era de la conectividad, caracterizada por el consumo de datos. Las naciones más ricas serán las que enfrenten de mejor manera los desafíos que impone la economía digital.
A nivel latinoamericano, Chile está bien posicionado en materia digital.
Somos líder en velocidad promedio de banda ancha en América Latina con 7.3 MbBps, superando el promedio global de 6.3 MbBp. También formamos parte del top ten de los países con menor costo para acceder a banda ancha móvil, de acuerdo con la Cepal. En 2016 los accesos a 4G aumentaron explosivamente a 6,3 millones de conexiones, registrando una variación interanual de 162%. En este aspecto, América Latina marcó un incremento de 121% de accesos a 4G, según dio a conocer la Subtel. Sin embargo, todavía mostramos un rezago considerable en comparación a los países OCDE, en cuanto al promedio de penetración de banda ancha fija y móvil en conectividad de empresas y Gobierno digital, con un retraso de 23 y 12 meses respectivamente. A esto se suman las brechas de penetración de internet en hogares por quintil socioeconómico, población urbano-rural y por tamaños de empresas, además del aumento del volumen de datos en la red que se multiplicará por 6,4. ¿Cómo abordar este nuevo escenario? Con más inversiones en infraestructura que permitan construir el Chile digital del siglo XXI. Hoy se requieren entre US$2.600 millones y US$2.900 millones por año. Para hacerse una idea, en los últimos cinco años la inversión ha sido de US$2.051 millones por ejercicio. Para lograr este inédito esfuerzo, es de vital importancia promover una política de telecomunicaciones con visión de futuro y reglas del juego claras. Entendemos que debe ser un esfuerzo a nivel país. Los desafíos son múltiples y está en nosotros aprovechar esta gran oportunidad. ℗
El autor es presidente ejecutivo de Atelmo.