Consumo de drogas en EEUU: un problema que preocupa a Yellen y Goldman Sachs
El incremento en el consumo abusivo de analgésicos, legales e ilegales, estaría vinculado a las dificultades que aún persisten en el mercado laboral estadounidense tras la crisis financiera, especialmente para trabajadores poco calificados.
“No estoy segura de si es causal o sintomático de las enfermedades económicas de largo plazo, que han afectado a estas comunidades”
—Las cifras de la “crisis opioide” en Estados Unidos son categóricas, pero sus orígenes y consecuencias en la actividad económica son aspectos que aún se está tratando de comprender. Un informe de Goldman Sachs volvió a poner el debate sobre la mesa y consultada al respecto, la presidenta de la Fed, Janet Yellen, también manifestó su inquietud.
“No estoy segura de si es causal o sintomático de las enfermedades económicas de largo plazo, que han afectado a estas comunidades y en particular a trabajadores que han visto reducidas sus oportunidades de empleo”, dijo la jefa del banco central estadounidense en respuesta a la pregunta del senador Joe Donnelly respecto a las implicancias de esta crisis. La autoridad monetaria destacó además que Estados Unidos es la única economía avanzada donde se está viendo un aumento de las muertes por esta causa.
En la primera economía mundial el abuso de opioides, analgésicos legales e ilegales que reducen la intensidad de las señales de dolor al afectar las áreas del cerebro que controlan las emociones, está matando a 100 personas diariamente.
En el país durante 2015 un total de 97,5 millones de personas usaron analgésicos recetados, de ellos 12,5 millones hicieron mal uso de la prescripción. De esta manera, con sólo 5% de la población mundial, Estados Unidos consume 80% de los opioides. MERCADO LABORAL Y CRISIS. “El aumento del número de personas en edad madura, especialmente hombres, que no está en la fuerza de trabajo es bien conocido, y esta historia se intersecta con el crecimiento del uso de opioides”, asegura el informe de analistas de Goldman Sachs, liderados por David Mericle.
Citando estudios en la materia, relatan que casi la mitad de los hombres de la primera edad que no está en la fuerza de trabajo, toma analgésicos todos los días, dos tercios de los cuales lo hacen para dolores diagnosticados por un profesional.
“Los datos sobre episodios de tratamiento de abuso de sustancias también refuerzan la narrativa: de las admisiones de individuos que no forman parte de la fuerza de trabajo, el 58% se describió como fuera de la fuerza de trabajo por ‘otras’ razones, lo que significa que no son estudiantes, dueñas de casa, retirados o personas con discapacidad, y el 47% de estos ingresos fueron para opioides, muy por encima de la tasa promedio”, se lee en el documento.
Este asunto ya había sido abordado por el ganador del premio Nobel de Economía, Angus Deaton, quien en marzo testificó ante el Comité Económico Conjunto del Congreso de EEUU. Allí presentó las cifras de la crisis y destacó el escenario actual que enfrentan los jóvenes y que a su parecer los deja más expuestos tanto al consumo de drogas, como al alcoholismo, el suicidio y otros males.
“La pérdida de buenos empleos para las personas que no tienen más que un título de escuela secundaria ha venido con una disminución en otros resultados socialmente significativos”, señaló el economista en esa oportunidad, recalcando la diferencia con lo que enfrentaron generaciones pasadas. “Los trabajadores que ingresaron al mercado laboral antes de los años setenta, incluso sin obtener un título universitario, podían encontrar buenos empleos en la industria manufacturera, empleos que conllevaban beneficios y capacitación en el trabajo (...) había un camino hacia la prosperidad de la clase media”, indicó.P
Angus Deaton, ganador del premio Nobel de Economía, abordó en marzo la “crisis de opioide” ante el Comité Económico Conjunto del Congreso de EEUU.