Mayor rol estatal en la economía de Bolivia
En el caso de Bolivia, su Carta Magna promulgada en 2009 instala conceptos menos afines al mercado.
Apegada al carácter plurinacional de Bolivia que se consagra en ese proceso, el modelo económico también se caracterizó como “plural”, lo que implica que “articula las diferentes formas de organización económica sobre los principios de complementariedad, reciprocidad, solidaridad, redistribución, igualdad, sustentabilidad, equilibrio, justicia y transparencia”, según establece el texto que lleva la firma de Evo Morales.
Adicionalmente, si bien el documento reconoce el “derecho a la propiedad privada individual o colectiva”, se garantiza siempre que el “uso” que se haga de ese derecho “no sea perjudicial al interés colectivo”. De no ser así, queda estipulada la opción de “expropiación”, con una “previa indemnización justa”.
De esta manera, el Estado juega un rol mucho más preponderante en la economía, con control completo de los recursos naturales, en medio además de un su
perciclo de los commodities.
Impulsado esencialmente por dicho comportamiento de los productos básicos en el mundo, se consolidó un buen ritmo de crecimiento del PIB. Así, mientras en la década que antecedió al hito constitucional Bolivia se expandía al 3,4% promedio anual, tras él esa cifra pasó al 4,5% (5,3% en los cinco años siguientes a la aprobación), de las mayores en la región. Además, el desempleo pasó de un promedio de 6,6% antes de la nueva Carta Magna, al 3,9%.P