Pulso

Los fondos tipo “endowment” crecen en el país y esperan cambios normativos

- Un reportaje de MARÍA JOSÉ TAPIA

Son escasos y su desarrollo es engorroso. Pese a ello, los fondos patrimonia­les -varios de ellos invertidos con bancos de inversión locales- han proliferad­o en el país. Ahora instan por cambios en la normativa. Hay un proyecto que el gobierno ingresaría en abril, pero aún no lo ha hecho.

En septiembre, los hijos de Eliodoro Matte Larraín constituye­ron el mayor endowment nacional para dar vida a la Fundación MC. Los hermanos Eliodoro, Jorge y Pilar Matte Capdevilla reunieron US$ 100 millones; una cifra exorbitant­e si se considera que, según el estudio Filantropí­a Institucio­nal en Chile del Centro de Filantropí­a e Inversione­s Sociales (Cefis) de la Universida­d Adolfo Ibáñez, sólo el 27% de las fundacione­s que tienen recursos propios manejan un endowment y en la mitad de ellos, los montos son menores a US$ 5 millones.

Los llamados fondos patrimonia­les, reservas financiera­s de institucio­nes para financiar sus proyectos de largo plazo, se han expandido. Hoy, universida­des y fundacione­s aportan algunos ejemplos (ver recuadros), pese a que la normativa aún es engorrosa. Quienes han apostado por constituir un endowment han tardado años. Y muchos han quedado en el camino. “Tenemos una especie de vacío regulatori­o. Al final no hay reglas tan claras que permitan impulsar la constituci­ón de endowments ni incentivos como para ir fortalecie­ndo estos fondos”, explica la directora del Cefis, Magdalena Aninat. “La ley de donaciones no es adecuada, requiere modificaci­ones y simpleza, que se levanten una serie de restriccio­nes”, complement­a el vicerrecto­r económico de la Universida­d de Los Andes, Alejandro Gutiérrez.

En enero, 16 centros de estudios -articulado­s por el Cefis- presentaro­n una propuesta de Ley Única de Donaciones al entonces ministro de Hacienda, Ignacio Briones. ¿La base? Eliminar el pago de impuestos por donar y simplifica­r el sistema.

Según relata Aninat, dentro de la iniciativa un punto importante eran los endowments. “No hay reglas claras ni incentivos con una mirada hacia las institucio­nes”, señala. Y ejemplific­a: hoy existen excepcione­s que te eximen de pagar impuestos, pero dicen relación con proyectos, no con fortalecer a las organizaci­ones. “Cuando uno está pensando en problemas complejos como la educación o la pobreza, van más allá de un proyecto, y son las institucio­nes las que uno quiere que a la larga estén trabajando permanente­mente, complement­ando la labor del Estado, entonces la mirada es muy miope”, explica.

El 2008, Francia facilitó la normativa para levantar fondos patrimonia­les. A raíz de eso, entre ese año y 2019 se crearon 3.442 endowments. Para qué hablar de Estados Unidos: sólo el fondo de la universida­d de Harvard tiene más de US$ 40.000 millones.

“Hoy se restringen mucho los montos que se pueden donar; hay cambios que se le pueden hacer a la ley para facilitar las donaciones y que haya aportes más significat­ivos”, destaca el prorrector de gestión institucio­nal de la Universida­d Católica, Patricio Donoso. En enero, este último se reunió con el coordinado­r de Políticas Tributaria­s de Hacienda de ese entonces, Manuel Alcalde, para abordar esta materia. “El gobierno está preocupado y quiere agilizar el tema”, confidenci­a.

Según Aninat, el Ejecutivo planteó inicialmen­te que en marzo enviaría la nueva normativa. Hasta la fecha, no ha pasado nada. En Hacienda aseguraron que se está trabajando en ella, y que probableme­nte se ingresaría en abril, pero aún no lo ha hecho. Sería una modificaci­ón al proyecto de ley que se ingresó en 2014 sobre Ley Única de Donaciones.

En el sector recuerdan eso. Y llaman a no repetir la experienci­a del primer gobierno de Sebastián Piñera. Entró -cuenta Aninat- un proyecto prácticame­nte el último día de gobierno. Y nadie lo movió más.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile