Ministerio de Energía dictará decreto para adoptar medidas preventivas por sequía
El biministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet, señaló que entre las medidas que se están tomando en el corto plazo figuran que las empresas de gas dispongan del combustible que deben tener, lo mismo en el caso de aquellas que suministran diésel, ajustar el calendario de mantención de las centrales y cuidar el agua.
—Pese al bajo nivel de los embalses, que se encuentran a menos de un tercio de su capacidad y a un nivel inferior a la mitad de su promedio histórico, tensionando la capacidad de generación, el biministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet, descartó que esta situación pueda llevar a un racionamiento eléctrico.
“No vemos escenarios de racionamiento en este momento. Estamos tomando medidas preventivas necesarias”, dijo en entrevista con CNN. Precisó que “vamos a firmar un decreto preventivo que permitirá tomar una batería de medidas preventivas”.
Cabe recordar que la semana pasada el Coordinador Eléctrico Nacional solicitó a la empresa AES Gener que la central carbonera Ventanas 1, que había salido de operaciones el 30 de diciembre de 2020, vuelva a estar disponible para operar. El organismo justificó la decisión en su revisión periódica de las condiciones de operación del sistema, “más aún en el escenario de sequía que se vive hoy en día, lo cual ha significado una disminución relevante de los aportes de las centrales hidroeléctricas”.
Jobet enfatizó que espera que la situación sea un tema coyuntural e indicó que no pone en riesgo el plan de descarbonización de la matriz energética.
Recordó que la severa sequía que afecta al país ya lleva 11 años y que este ha sido uno de los años más secos de la historia. “De todos los que se tiene registro, solo 2 han sido más secos, y en ambos hubo racionamiento eléctrico (1968 y 1998)”, afirmó.
Sin embargo, aseveró que debido al proceso de diversificación de la matriz energética, las generadoras ya no son tan intensivas en hidrolectricidad.
En este sentido, sostuvo que “hoy dependemos mucho menos del agua para generar electricidad. En el pasado representaba cerca del 70% y hoy apenas el 19%”.
MEDIDAS
Entre las medidas que se están tomando en el corto plazo mencionó que las empresas de gas dispongan del combustible que deben tener, lo mismo en el caso de aquellas que suministran diésel, ajustar el calendario de mantención de las centrales y cuidar el agua.
El ministro dijo que si bien se está creciendo aceleradamente en el uso de energías renovables, estas aún representan un porcentaje pequeño y recordó que para incentivarlas aún más y reemplazar los combustibles fósiles, se debe invertir en líneas de transmisión.
De acuerdo con los datos de la Dirección General de Aguas, a julio los principales embalses del país tienen acumulado un total de 3.645 hectometros de agua, esto es un 28% de su capacidad y el 46% de su volumen histórico.
A nivel regional los embalses con menor almacenamiento son los de Coquimbo, Valparaíso y Maule.
Cerca del 72% de la generación eléctrica producida en el país tuvo fuente térmica y el 12,25% provino de fuente hidráulica. El 10% fue generación solar y el 5%, eólica.
EFECTO EN EMPRESAS
Hace unas semanas, las empresas informaron impactos en sus estados financieros producto de la baja hidrología. Las compañías eléctricas Enel Chile comunicó al mercado un ajuste en sus proyecciones para el ejercicio en curso, concretamente en el Plan Estratégico 2021-23. Precisó en un hecho esencial enviado a la CMF que prevé para el ejercicio 2021 una variación negativa en el Ebitda con relación al inicialmente proyectado. Apuntó como primer factor de esto a las previsiones de una condición hidrológica más seca que la contemplada inicialmente en el Plan Estratégico. A ello se sumó la reducción en el abastecimiento de gas natural para el mercado chileno.
Engie, en tanto, explicó en su análisis razonado adjunto a sus estados financieros que el Ebitda del primer semestre disminuyó 7% hasta US$188 millones, “producto, principalmente, de un primer trimestre afectado por aumentos en los costos marginales del sistema debido a la escasez hídrica, menor disponibilidad de gas y fallas o mantenimientos de centrales a carbón en el sistema”.