Colbún anuncia millonario pago de dividendos por venta de sus activos de transmisión
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formáticos”, afirmó Sue Workman, directora de informática de la Universidad Case Western Reserve en Cleveland. “Eso solía demorar uno o dos días”.
Para el semestre de otoño (boreal) que se acerca rápidamente, la universidad se esfuerza por equipar las aulas con pantallas de video, micrófonos y otras herramientas para que los estudiantes tengan la opción de tomar algunas clases desde casa, afirmó Workman. Los pedidos de pantallas y micrófonos se han retrasado, agregó.
En el pasado, los revendedores de TI que combinan aplicaciones de software con hardware de computador —conocidos como revendedores de valor agregado o VAR por sus siglas en inglés— podían llenar las inesperadas brechas de suministro para laptops y otros dispositivos, dijo.
“Ellos también se quedaron cortos”, afirmó. “No tienen ningún inventario”.
Otras empresas están sintiendo los efectos posteriores de la escasez en sus clientes corporativos. TransUnion, una empresa con sede en Chicago que ofrece análisis de verificación de crédito para más de 60.000 empresas, está viendo a los clientes en sectores como la industria automotriz y la de telecomunicaciones afectados por la escasez.
“Estamos viendo algunos desafíos en la cadena de suministro”, afirmó Abhi Dhar, director de tecnología e información de TransUnion. “Lo vemos en el mercado, nuestros clientes lo están viendo”.
Internamente, los socios tecnológicos de la empresa han ayudado a paliar las necesidades de TI donde existen problemas, afirmó Dhar.
“Está afectando nuestra cadena de suministro, lo que irónicamente nos hace mejorar en algo en lo que deberíamos ser mejores de todos modos, que es pronosticar dónde vamos a necesitar infraestructura”, afirmó. TransUnion está en medio de la migración de sistemas a la nube. “No podemos seguir comprándola”, sentenció.
Desde universidades hasta firmas financieras y tiendas de alimentos o minimarkets, la escasez mundial de chips —que se produce en medio de los altos precios de las obleas de silicio y las resinas y metales utilizados en su fabricación— se está propagando a través de las cadenas de suministro. Está provocando que los fabricantes de hardware tecnológico dejen las fábricas inactivas, que los proveedores pongan los pedidos en espera y ha dejado a los clientes de TI empresarial en el limbo, dicen los analistas de la industria.
En toda la economía, los directores de informática y otros líderes tecnológicos están lidiando con la disminución de los suministros de los bloques de construcción físicos de TI, elementos como pantallas de cristal líquido, sensores de imágenes, circuitos integrados y procesadores, afirmó Mario Morales, vicepresidente del grupo de tecnologías de habilitación y semiconductores en la firma International Data Corp. que investiga esta industria.
“Los proveedores están operando a plena capacidad y no se espera que se pongan al día hasta finales de este año”, afirmó Morales.
Los grandes fabricantes mundiales de chips, incluidos Intel Corp. y Taiwan Semiconductor Manufacturing Co., dicen que están agregando nuevas plantas de producción para satisfacer la creciente demanda, aunque parte de esa capacidad no estará disponible hasta dentro de dos años más. El mes pasado, Pat Gelsinger, director ejecutivo de Intel, dijo que ve que la escasez de semiconductores posiblemente se extienda hasta 2023.
Plantronics Inc., una empresa de Santa Cruz, California, que fabrica audífonos y parlantes de alta gama para videoconferencias corporativas y herramientas de colaboración, en las últimas semanas comenzó a realizar pedidos de chips de computadores con más de un año de anticipación, aproximadamente el doble de tiempo de lo que habría sido hace un año, afirmó el presidente ejecutivo Dave Shull.
Solo en las últimas semanas, un antiguo proveedor de circuitos integrados tuvo que cancelar una entrega después de quedarse sin materias primas, afirmó Shull. Contratiempos como estos han ralentizado la producción en la fábrica de Plantronics en México, dejando a los CIO de sus clientes de la revista Fortune 500 esperando de brazos cruzados.
“Hay chips en todo lo que enviamos”, afirmó Shull. “Pero tenemos más demanda que oferta”.
La compañía, que opera bajo el nombre Poly, aún tiene que subir los precios —aunque los márgenes se están viendo afectados— mientras busca en el mercado “segundas o terceras fuentes de opciones”, agregó.
Luminar Technologies Inc., con sede en Orlando, Florida, que fabrica sensores visuales para automóviles autónomos, anunció el mes pasado planes para adquirir OptoGration Inc., uno de sus proveedores de chips desde hace mucho tiempo, en un intento continuo por depender menos del mercado global. Hace cuatro años, Luminar compró Black Forest Engineering, que ahora es su subsidiaria de diseño de chips. No se revelaron los términos de los acuerdos.
Con la compra de OptoGration, que se espera que se cierre en el tercer trimestre, Luminar asegurará un suministro de aproximadamente un millón de chips al año, afirmó la compañía.
Aunque las conversaciones iniciales con OptoGration son anteriores a la actual escasez de chips, el estado del mercado ayudó a impulsar el acuerdo, afirmó Jason Eichenholz, cofundador y director de tecnología de la empresa.
“Diseñamos estos sistemas desde los chips hacia arriba”, pero debido a que los chips altamente personalizados de la empresa se fabricarán internamente, Luminar está aislado de la escasez global, afirmó Eichenholz.
“No es algo que me preocupe”, sentenció. “No tengo otro fabricante que venga a recoger mis chips”.
Agam Shah contribuyó a este artículo.
—La generadora eléctrica Colbún, perteneciente al grupo Matte, informó este martes que, tras haber recibido la autorización respectiva por parte de la Fiscalía Nacional Económica (FNE) para la venta de sus activos de transmisión a Alfa Desarrollo SpA, estima que la transacción se concretará el 30 de septiembre.
El precio de la operación, que había sido anunciada en marzo, fue ajustado a US$1.185 millones versus los US$1.295 millones estimados originalmente.
La compañía precisó que, de este modo, el efecto esperado en los resultados producto de la venta sería de US$834 millones antes de impuestos.
En marzo Colbún dio a conocerel resultado del proceso iniciado en septiembre del año pasado, mediante el cual buscaba incorporar un socio estratégico a su filial de transmisión, o bien vender la totalidad de sus activos en ese sector.
El comprador elegido Alfa Desarrollo SpA es una sociedad controlada en 80% por APG Energy and Infra Investments, S.L. (parte de APG, fondo de pensiones holandés) y 20% por Celeo Redes, S.L.U. (filial de Celeo, Concesiones e Inversiones S.L.).
PAGO EXTRAORDINARIO DE DIVIDENDOS La compañía indicó que “con motivo del cierre de la transacción y el consecuente pago del precio respectivo, Colbún dispondrá de una posición de liquidez sólida para el cumplimiento de su plan de inversiones y la operación normal de la sociedad en los próximos años, pudiendo realizar una distribución extraordinaria de dividendos”.
En consecuencia, añadió, “producto del ingreso del precio de la transacción antes mencionada y de la posición de liquidez de la compañía, el directorio propone distribuir la cantidad de US$1.000 millones como dividendo”.
Para ello el directorio plantea la distribución de un dividendo provisorio por US$250 millones que se imputará a las utilidades líquidas correspondientes al ejercicio que termina el 31 de diciembre de 2021 y a la vez acordó citar a junta de accionista para el 15 de septiembre con el objeto de votar el pago de un dividendo eventual por US$750 millones con cargo a las utilidades acumuladas de la sociedad.
En ambos casos el pago se realizaría a partir del 12 de octubre.