Por qué los buques portacontenedores no pueden sortear el taco de los puertos de California
Parece que no hay manera de evitar la impresionante acumulación de buques portacontenedores en los trabados puertos de Los Ángeles y Long Beach. Los buques recién llegados se suman a una flotilla récord en espera para descargar y que el domingo llegó a 73 barcos, según el Marine Exchange of Southern California, casi el doble que hace un mes y expandiendo una flota que se ha convertido en una clara señal de las interrupciones y retrasos que sacuden las cadenas de suministro mundiales.
Antes de la pandemia, era inusual que más de un barco esperara para atracar.
Los grandes buques continúan uniéndose al taco, dicen los expertos, porque las líneas navieras y sus clientes de carga tienen pocas opciones para restablecer innumerables cadenas de suministro que transportan mercancías a Estados Unidos, que se han construido durante décadas teniendo como piedra angular a la bahía de San Pedro, ahora atascada por la desbordante demanda de importaciones.
Aunque algunos barcos se han dirigido a otras puertas de entrada de importación, y un puñado de cargadores han fletado embarcaciones más pequeñas para mover mercancías a través de otros puertos, la desviación es menor en comparación con los cientos de miles de contenedores varados en las aguas del sur de California.
“Todo está alineado hacia L.A. (Los Ángeles)”, afirmó Nathan Strang, gerente senior de rutas comerciales para operaciones oceánicas en Flexport Inc., un agente de carga con sede en San Francisco.
La congestión de este año ha sido causada por un aumento en las importaciones, ya que la demanda de los consumidores en Estados Unidos se ha desplazado de los servicios a los bienes y las mejoras para el hogar y los retailers se han apresurado a reabastecer los inventarios que se agotaron el año pasado en los primeros meses de la pandemia.
Los puertos vecinos de California son la principal puerta de entrada marítima a Estados Unidos gracias al crecimiento de la “contenerización” en los últimos 60 años y a una explosión en el comercio de mercancías, en particular el comercio de EE.UU. con China. El año pasado, los dos puertos manejaron el equivalente a 8,8 millones de contenedores de importación cargados, más del doble de los 3,9 millones de contenedores cargados que llegaron a los siguientes puertos más activos del país en Nueva York y New Jersey.
Los puertos de California están al alcance de China y las fábricas que producen grandes volúmenes de productos electrónicos, ropa y una variedad de otros bienes de consumo. Ahí tienen suficiente terreno para al
que esperan en alta mar sigue creciendo, y los expertos dicen que hay pocas alternativas viables a la principal puerta de entrada del país para las importaciones asiáticas.