Las reformas clave de Gabriel Boric
Ambiciosa reforma tributaria Reforma de 5 puntos del PIB
El programa del presidente electo afinado durante la segunda vuelta bajó del 6% al 5% del PIB (8% en ocho años) su monto estimado de recaudación durante cuatro años, lo que demuestra la envergadura del proyecto. La reforma de Bachelet enviada en marzo 2014 apuntaba a los 3 puntos del PIB (unos US$ 8.200 millones de entonces).
Exenciones y plan antievasión
Un grueso de los ingresos tributarios de la reforma provendrán del fin de algunas exenciones (al impuesto a las ganancias de capital de las acciones de alta presencia bursátil, por ejemplo) y de medidas contra la evasión y elusión (registro de beneficiarios finales y mayor acceso a cuentas bancarias, entre otros).
Royalty e impuesto al patrimonio
La reforma también considera un royalty a la minería (impuesto ad valorem a la extracción del mineral) y un impuesto a la riqueza con el fin de gravar a los altos patrimonios.
Impuestos verdes y a la renta
Ambos impuestos han generado diferencias al interior del equipo cercano al presidente electo dado sus efectos económicos y políticos. Mientras algunos son partidarios de separar el ítem de impuestos verdes de la reforma y enviarlo en otro proyecto, otros dudan si hay piso para avanzar en la desintegración total del sistema tributario.
Cambio estructural al modelo de pensiones Nuevo sistema sin AFP
Pese a que reconocen las dificultades técnicas y políticas del cambio, el programa propone un modelo público de pensiones sin AFP ni capitalización individual como hoy la conocemos. Sin embargo, las AFP seguirán existiendo en la administración de quienes opten por mantener en esas instituciones sus cotizaciones acumuladas hasta el inicio del nuevo sistema. En Apruebo Dignidad han dicho que las AFP podrían seguir existiendo para la gestión del ahorro voluntario (APV) y reconocen las dificultades de terminar con el ahorro individual.
Pensión básica universal
Se establece una Pensión Básica Universal (PBU) de $ 250 mil: beneficiará a los adultos mayores a partir de los 65 años y reemplazará al actual pilar solidario de vejez (PBS y APS de vejez). La clave de esta medida, que ha provocado matices en el seno de Apruebo Dignidad por su alto costo, será la gradualidad en su implementación, ya que dependerá de los ingresos de la reforma tributaria y la salud de las finanzas públicas.
Pilar contributivo
Propone un pilar contributivo con cargo a cotizaciones obligatorias de trabajadores y una nueva cotización de cargo de empleadores del 6%. Ese pilar contará con un componente de contribución en cuentas de ahorro personales (dos tercios del flujo de contribución en régimen) y el tercio restante se irá a un componente de reparto.