Europa teme que se produzcan consecuencias económicas generalizadas si se prolonga el corte de gas ruso
Amedida que se acerca la fecha límite para que Rusia reanude el suministro de gas natural a Alemania esta semana, los funcionarios y ejecutivos europeos están cada vez más preocupados por la serie de consecuencias económicas que se extenderían por todo el continente si Moscú mantiene el grifo cerrado.
El gasoducto Nord Stream, que transporta el gas desde Siberia a Alemania, cerró el lunes pasado para realizar el mantenimiento anual, que se espera que dure 10 días. Muchos en Occidente temen que Moscú prolongue el cierre, posiblemente de forma permanente, y prive a Alemania, la potencia industrial de Europa, de un ingrediente clave para sus fábricas y las de sus vecinos.
Los líderes europeos culparon a Moscú de utilizar el gas como arma cuando los flujos del gasoducto comenzaron a disminuir el mes pasado. La capital rusa culpó el déficit a problemas técnicos relacionados con las sanciones occidentales.
Según el programa anual de mantenimiento, Nord Stream vuelve a estar en funcionamiento el próximo jueves, lo que significa que el flujo de gas debería reanudarse al día siguiente.
Para complicar el cálculo, funcionarios y ejecutivos dicen que podría ser difícil determinar si Rusia está restableciendo los flujos de gas en su totalidad. En un caso, Moscú podría volver a poner en marcha el gasoducto, pero con volúmenes menores, como ya ha hecho, alegando problemas técnicos relacionados con las sanciones.
Alemania depende en gran medida del gas ruso, y también actúa como centro de tránsito para el gas destinado a Austria, la República Checa y Ucrania. La industria alemana también fabrica materias primas y componentes, como vidrios, plásticos y otros productos químicos, que son cruciales para otros fabricantes de toda Europa y de fuera de ella.
Por diversas razones, Rusia ya ha dejado de suministrar gas a Francia, Polonia, Bulgaria, Finlandia, Dinamarca y los Países Bajos. Recientemente redujo el suministro a Alemania e Italia, culpando a las sanciones occidentales de los cortes.
En caso de que Nord Stream siga vacío después del jueves, Berlín dijo que declararía el estado de emergencia, utilizando la nueva legislación para tomar el control del mercado energético. Y en caso de que el corte provoque una escasez de gas, podría racionar el combustible.
El jueves pasado, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, advirtió que la Unión Europea tenía que “prepararse para un escenario en el que tengamos que cambiar totalmente de gas ruso”.
El mismo día, el presidente ejecutivo de Shell PLC, Ben van Beurden, declaró en una conferencia sobre energía que Europa se enfrenta a la posibilidad de una fuerte subida de precios mientras el continente se prepara para un invierno “realmente duro”, por lo que podría tener que racionar su energía.
Berlín insiste en que no cortará las exportaciones a sus vecinos. Los países de la UE tienen acuerdos -uno de ellos, la directiva SOSdiseñados para evitar que una nación acapare combustible en tal escenario, y Alemania ha prometido solidaridad con varios vecinos si el gas ruso deja de fluir.
El comisario de Energía de la UE, Thierry Breton, viajó a Berlín a principios de este mes. Uno de los principales objetivos de los funcionarios de la UE es garantizar que no se repita lo ocurrido en los primeros días de la pandemia del Covid-19, cuando algunos países miembros acapararon equipos médicos y de protección.
“Cada país debe demostrar que hará todo lo posible por sí mismo y por los demás”, comentó Breton tras la visita. El órgano ejecutivo de la UE, del que forma parte Breton, publicará en breve nuevas directrices sobre la conservación del gas que sugerirán limitar la temperatura de los edificios de oficinas en todo el bloque a 19 grados Celsius, o unos 66 grados Fahrenheit, según dijeron el jueves los funcionarios.
Los fabricantes europeos de industrias que consumen mucho gas han cambiado a combustibles alternativos, como el petróleo y el carbón, cuando es posible, y han hecho acopio de productos químicos y otros ingredientes esencia