“Cuando las ayudas se retiren se notará un crecimiento relevante en las solicitudes de reorganización y liquidación”
prevé que a contar de marzo o abril del próximo año entre en vigencia la nueva ley de Insolvencia y Reemprendimiento. La normativa vendrá a acelerar los plazos de los procedimientos de liquidación y reorganización. Considera que existe una mayor concentración de reorganizaciones de empresas vinculadas a la construcción e inmobiliarias este año. Además, insiste en que el Sernac debe fiscalizar a los estudios de abogados que asesoran a personas con altas deudas.
El superintendente de Insolvencia y Reemprendimiento, Hugo Sánchez, estima que durante 2023 habrá un aumento relevante en el número de solicitudes de reorganizaciones y liquidaciones de empresas. En conversación -vía Zoom con Pulsodesde Londres, Inglaterra, ciudad en la que participó de la reunión anual de la Asociación de Reguladores de Insolvencia (IAIR, en su sigla en inglés), también detalla los avances del proyecto de ley que viene a reformar la normativa del área, la que se apronta a cumplir ocho años desde su entrada en vigencia.
El regulador adelanta que el gobierno decidió poner suma urgencia a la iniciativa y espera que a contar de marzo o abril del próximo año ya esté en funcionamiento. Según él, el nuevo cuerpo legal permitirá reducir fuertemente los plazos que requieren las firmas a la hora de poner en marcha planes de reorganización y liquidación. A modo de ejemplo, dice que una pyme que entra en quiebra podrá disminuir dicho trámite a la mitad, tomando sólo un año.
¿Cómo ha evolucionado la insolvencia en las empresas, en particular en el sector de la construcción, dados los últimos casos que se han conocido?
-Tenemos un aumento en las reorganizaciones de empresas que han estado entregando servicio al Serviu y al MOP en la construcción de viviendas básicas y caminos, respectivamente. Muchas han tenido cuentas por cobrar y no les han pagado. También tienen en inventario muchas unidades, porque la inflación está muy alta y las tasas de interés también. Hemos tenido en este primer semestre un aumento en la cantidad de reorganizaciones, con una concentración en el sector de construcción e inmobiliario. Hasta septiembre la cantidad de reorganizaciones había aumentado desde 25 a 30 y las liquidaciones en las empresas habían bajado un 35% entre enero y agosto, comparativamente con igual período del 2021.
¿Cuándo cree que será promulgada la reforma a la Ley de Insolvencia y Reemprendimiento?
-Esperamos que para el año que viene esté aprobada, porque hay una vacancia de tres meses en el que se permite a los tribunales civiles poder entender la ley. Así es que si se aprueba en diciembre, ya en marzo o en abril debiera entrar en funcionamiento.
El Banco Central y la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) avizoran que en 2023 estaremos en recesión. Por lo tanto, creemos que cuando las ayudas se retiren se notará un crecimiento relevante en las solicitudes de reorganización y liquidación. Entonces, mi idea es estar preparados para que con esta nueva legislación tengamos nuevos procedimientos, que sean mucho más rápidos. Hemos medido que por lo menos dos años es lo que duran las liquidaciones para empresas de menor tama