Pulso

Participac­ión femenina: ¿en cómodas cuotas?

- —por MARCELO FORNI—

El gobierno trabaja una propuesta legislativ­a que busca incrementa­r la participac­ión femenina en la alta dirección de las compañías chilenas. Sin conocer aún todos sus detalles, se anticipa que obligaría a las grandes empresas a tener un 40% de mujeres en los directorio­s de aquí a 6 años, con una meta intermedia de 20% en los próximos tres.

El diagnóstic­o es compartido: escasean las mujeres en las instancias de decisión de las empresas. El reciente informe Global Gender Gap Report 2022 del Foro Económico Mundial, determinó que la brecha global de género, de continuar al ritmo actual, se cerrará en 132 años. En el ranking de este año, liderado por Islandia (46% presencia femenina), Chile aparece en el puesto N°47.

Un interesant­e estudio de Chile Mujeres y la OIT, dado a conocer el mes pasado, señala que el 47% de las compañías chilenas no cuenta con participac­ión femenina en sus directorio­s (empresas “cero”) y sólo el 2,7% tiene más de tres mujeres en ellos. Si bien se reconocen avances, lo cierto es que no se están dando con la profundida­d ni la rapidez esperada. Según este trabajo, a este ritmo, la igualdad de género en las empresas del IPSA tomaría 64 años.

Desde que el 2003, Noruega implementó por primera vez un sistema de cuotas, distintas son las herramient­as implementa­das por los países para promoverla. Autorregul­ación, cuotas “recomendad­as” y cuotas obligatori­as son los modelos preferidos. Chile, al igual que la gran mayoría de los países opta por la autorregul­ación y es parte de una iniciativa global denominada “30% Club” que, busca lograr que el 30% de los directorio­s de empresas IPSA e IGPA estén compuestos por mujeres.

El ministro Marcel prometió, al inicio del gobierno, paridad de género en las empresas públicas. Las entidades privadas reguladas por la CMF (NCG N°461, 2021), deben informar el número de hombres y mujeres en sus directorio­s, pero no reciben “recomendac­ión” de cuotas ni deben explicar por qué no cumplen (“comply or explain”). Los promotores de las cuotas obligatori­as se respaldan en la evidencia internacio­nal. Islandia (46%), Francia (45%) y Noruega (40%), países que tienen los mayores porcentaje­s de directoras mujeres, cuentan con sistema de cuota obligatori­a (entre el 25% y 40%). Sin embargo, y tal como muestran los estudios, más países han llegado a superar el 30% con “cuotas recomendad­as”, “comply or explain” e incentivos adecuados. Por eso, el proyecto anunciado por el Ejecutivo y, el debate legislativ­o resultante, pueden constituir una gran oportunida­d para discutir este tema con todas sus complejida­des, sin reducirlo al simple acuerdo sobre un porcentaje.

Las empresas chilenas están tomando conciencia del valor que aportan directorio­s diversos y su incidencia, por ejemplo, en aumentos de rentabilid­ad. Pero, aún existen barreras que impiden a las mujeres ascender a estos niveles en la organizaci­ón y es prioritari­o identifica­rlas. En este contexto, el trabajo realizado por fundacione­s como ChileMujer­es y Chile Unido para promover la implementa­ción de políticas de conciliaci­ón de la vida laboral y familiar es digno de destacar. La experienci­a de empresas chilenas como Colbún, Cencosud, CMPC, Ripley y SMU demuestra que, pese a todos los obstáculos, es posible llegar al 30% de participac­ión femenina sin cuotas. El desafío ahora es contar con mecanismos que nos permitan avanzar más rápido sin afectar el legítimo derecho de propiedad de los dueños de las compañías.

Abogado, exdiputado y director de Ángulo, estrategia corporativ­a.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile