LO QUE TIENES QUE SABER
La agenda de gobierno continúa enfocada en enfrentar la emergencia de los incendios forestales en la zona centro-sur del país y los errores no forzados de tres semanas en terreno contaminan la gestión. Esta vez fue el turno del ministro de Vivienda, Carlos Montes, que atizó el debate por la intencionalidad de los siniestros con una llamativa teoría acerca de la responsabilidad de los conejos en la propagación del fuego. Como sea, aunque La Moneda se empeña en bajar el perfil del debate -para, al parecer, evitar críticas por la falta de control del orden público en la zona-, los actores involucrados insisten en que parte importante de la magnitud de la emergencia se debe a acciones directas para producir incendios. Mañana lunes -en tanto- regresa a sus funciones en La Moneda el Mandatario Gabriel Boric -quien en los últimos días estrenó un estilo “híbrido” de descanso desde su casa, donde, según sus asesores, se mantuvo atento a la crisis de incendios. Junto al retorno del Presidente se entra en tierra derecha para el anunciado cambio de gabinete que se prepara para reiniciar el año en marzo. Los ministros y partidos ya comenzaron el desfile de balance y peticiones que deberán -o no- ser acogidos por el Presidente. Recién comienzan a aparecer luces de los futuros movimientos, pero de algo hay certeza en el oficialismo: el remezón fuerte se viene en la segunda línea de mando -los subsecretarios-, donde se espera equilibrar las fuerzas de las alianzas de gobierno. Y fue nuevamente el subsecretario de Relaciones Económicas, José Miguel Ahumada, quien enfrascó al gobierno en una disputa con el Congreso y, otra vez, por el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP11). En esta oportunidad, Ahumada puso en alerta a los senadores luego de que señalara que había firmado la primera side letter acordada entre el gobierno y un país miembro del acuerdo, Nueva Zelandia, sin consulta al Congreso.
Y probablemente en lo más importante de la semana -perdón Festival de Viña-, el viernes 24 se cumplió un año desde la invasión de Rusia a Ucrania. De madrugada, Putin dio la orden de atacar por cielo, mar y tierra en 2022 al país que preside Volodimir Zelensky y llevó el horror a millones de personas. La enorme destrucción del país contrasta con la valentía del pueblo ucraniano y la solidaridad de Europa y el mundo frente a una agresión sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial.