Zipaquirá, la gran familia de Egan
Los habitantes se mostraron orgullosos de tener al ‘rey’.
Zipaquirá, situada a unos 45 kilómetros de Bogotá y patrimonio histórico, cultural y religioso de Colombia, vibró ayer con la etapa que consagró a Egan Bernal como el primer latinoamericano en proclamarse campeón del Tour de Francia.
Las calles del municipio estuvieron casi desocupadas durante las poco más de tres horas que duró la jornada de cierre del Tour, con meta en París, donde ganó Caleb Ewan (Lotto).
Todos estaban emocionados celebrando la gesta del joven colombiano, y entre ellos estaba Álvaro Julio Bernal, abuelo del corredor, quien recordó los comienzos deportivos del campeón.
“No sé cómo haría para hacer sus tareas porque volvía a la casa y otra vez se iba a entrenar con el papá. Fue muy duro”, dijo.
A medida que la carrera avanzaba, el pulso de la gente se aceleraba porque ‘ el Joven Maravilla’ se acercaba con cada golpe a lo más alto del podio del Tour, una carrera que se le había resistido a otros ‘Escarabajos’.
Al igual que en Zipaquirá, en otras ciudades y pueblos del país las plazas principales y los comercios dispusieron de televisores para que nadie se perdiera los detalles de la inolvidable hazaña. No hubo rincón en donde el triunfo de Egan pasara desapercibido.
En esa concurrida plaza del municipio cundinamarqués también estuvo la prima de Egan, Karen Bernal, quien afirmó que el ciclista ya cumple su sueño.
“Toda la vida soñó con ser ciclista y en este momento lo está logrando. Es un orgullo también para Zipaquirá que represente a nuestra ciudad en Europa”, reconoció la mujer.
Esta localidad, a la que los turistas reconocen por su imponente Catedral de Sal, tendrá para decirle al mundo con orgullo que es “cuna” del primer latinoamericano en ganar el Tour de Francia.