Mitos y realidades del cannabis en medicina
COLOMBIA, EN LA RUTA PARA SER EL PRIMER PRODUCTOR MUNDIAL.
● Contrario a lo que muchos creen, el cannabis tiene una fuerte participación en la medicina y en la producción de cosméticos.
En Colombia está permitida su producción, a través de una serie de licencias para su regulación. Así lo explicó María Fernanda Arboleda, médica cirujana de la universidad Javeriana, anestesióloga y especialista en paliativa del dolor, quien asegura que “el marco regulatorio colombiano es un modelo para el mundo”; asimismo, el país continúa el proceso para convertirse en un gran productor. Sin embargo, los mitos aún mantienen como tabú, las propiedades de esta planta.
Lo cierto es que una cosa es el cannabis de uso recreativo, y otro el uso medicinal o estético. En la medicina se suministran algunos componentes de un tipo de planta específico, en cantidades prudentes que correspondan con la condición precisa del paciente.
Es decir, si usted padece de alguna enfermedad, fumar marihuana no lo va a curar, es necesario que reciba atención médica.
La doctora María Fernanda desmintió algunos de los mitos más comunes respecto a esta sustancia:
La única forma de consumir el cannabis es fumándolo:
FALSO. Se puede suministrar por vía oral, tópica, a través de supositorios o inhalado.
Es una droga milagrosa y sirve para todo el mundo:
FALSO. Es una herramienta que sirve para el control de síntomas de forma complementaria. Además, tienen indicaciones y contraindicaciones específicas.
Por su parte, Elsa Navarro habló sobre el uso del cannabis en los cosméticos. Para ella tiene gran relevancia la calidad del producto, con el uso adecuado de sus componentes. También asegura que en el caso cosmético los productos pueden tener un ingrediente activo que provenga del cannabis y aporte un beneficio estético específico de acuerdo con su uso.
Ambas expertas coinciden en que hace falta educación por parte de los médicos para que este mercado se mueva de forma adecuada y los pacientes reciban un tratamiento acorde a sus necesidades. Adicionalmente, se debe eliminar el estigma frente al producto.