Libros al cine

Muchas son las adaptaciones al cine que se han hecho de obras literarias inéditas y de sagas enteras.

Sin duda alguna, soy fiel partidaria que jamás lo audiovisual superará la magia que se desprende al abrir la imaginación con cada página que se devora de un libro. Sin embargo, también reconozco grandes adaptaciones que se han hecho y que, en definitiva, acercan a un público mayor a la historia original.

Este año, por primera vez, la Feria Internacional del Libro de Bogotá tendrá una invitación muy particular. Se trata de la iniciativa de que el público asistente vote por el libro que quiere ver hecho película y así, trabajar de la mano de productores y realizadores para que se convierta en realidad, y que en unos años la gente pueda ver en cines la primera cinta salida de la FILBO.

Las letras son el origen de cualquier proyecto artístico. Por eso, en esta Feria veremos espacios no solo para el cine, sino para la música, la gastronomía, la ciencia y las artes gráficas. Cosa bien pensada en tiempos donde las historias de nicho son las que atraen.

Ojalá que entre tanto influenciador y actor queriendo imponer modas de “cómo vivir” y “tips para lo uno y lo otro”, el público descubra verdaderos tesoros literarios que permiten entrever las múltiples realidades a las que somos ajenos y que nos ponen a reflexionar, ojalá, también en cines.