Niñas, no madres
En una acción sin precedentes, cuatro casos de mujeres, víctimas de violencia sexual siendo menores de 14 años, fueron presentados ayer ante el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra (Suiza) para demandar a Ecuador, Nicaragua y Guatemala.
Según representantes del Centro de Derechos Reproductivos y de la organización Planned Parenthood Global, que llevarán adelante el litigio, el objetivo es que a través de las medidas que tome el Comité de DD. HH. de la ONU se puedan garantizar los derechos y la salud de las niñas víctimas de abuso.
La iniciativa llega en un momento clave, pues la violencia sexual en contra de menores es cada vez más latente en la región. Solo en Ecuador, cada día siete niñas menores de 14 años resultan embarazadas a causa de la violencia sexual, y en Guatemala el embarazo es la primera causa de deserción escolar entre niñas y adolescentes.
Es de aplaudir la valentía de las cuatro mujeres. Lo más claro es que la causa noble de Norma, Lucía, Susana y Fátima (identidades ficticias) busca el acceso a justicia y reparación, pero sobre todo, garantizar que a otras menores no les pase lo mismo que a ellas.
Por eso, cualquier medida del Comité de DD. HH. de la ONU en el que se reconozca que las niñas son niñas y no madres es ganancia. Es el momento de proteger los derechos de las menores y de entender que el acceso a servicios de salud reproductiva no es un lujo, sino una necesidad.