Estado pide perdón a la familia de desaparecido
Se reconoció la responsabilidad en el crimen de joven sucreño en 1992.
● El Estado colombiano reconoció su responsabilidad y pidió perdón a la familia de Gerson Jairzinho González Arroyo, un joven que fue desaparecido en 1992 por el hoy extinto Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, inteligencia estatal).
El acto estuvo presidido por la ministra de Justicia, Margarita Cabello Blanco, y en él también se reconoció la responsabilidad del Estado en aspectos como la falta de avances en la investigación, la sanción a los responsables de los hechos y la determinación del paradero de la víctima, según un comunicado de su despacho.
El acto tuvo lugar en el Parque Santander de Sincelejo (Sucre) y responde al acuerdo de solución amistosa que se suscribió el 5 de diciembre de 2016 ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). En el mismo, se pactaron medidas de satisfacción, garantías de no repetición y medidas en materia de justicia con el fin de garantizar la reparación integral de los familiares de la víctima, agregó la información.
Según datos del Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo, González Arroyo era un joven de 17 años que vivía con su familia en Sincelejo y se dedicaba En junio pasado se inició la búsqueda de 3.757 personas víctimas de desaparición forzada en los departamentos de Sucre y Bolívar.
a la cría de pollos como medio de subsistencia. La mañana del 20 de noviembre de 1992, mientras caminaba por el sector de Las Peñitas en Sincelejo, fue secuestrado y desaparecido en una camioneta blanca de cuatro puertas, adscrita al DAS de Sucre.
Al parecer, González Arroyo había sido señalado ante el DAS por un ganadero
de la zona como presunto responsable del delito de extorsión. Esta entidad, en lugar de ponerlo a disposición de las autoridades judiciales para la respectiva investigación, lo detuvo ilegalmente y procedió a su desaparición forzada, según el colectivo de abogados.
En el expediente penal, difundido por esa organización,
se consigna que su padre, Adolfo González, "se había enterado que funcionarios del DAS habían trasladado a su hijo a una finca en Betulia donde lo habían torturado y luego trasladado a una finca en Sincé". Allí, lo entregaron a un sicario apodado "El ciego", quien lo había llevado al municipio de San Onofre y luego a Montería.
Desidia es negligencia, falta de cuidado. Ejemplo: el 31 de este mes se cumplen 12 meses desde cuando la firma de ingenieros Solarte se vió obligada a entregar las concesiones con las cuales hacía el mantenimiento de varias carreteras del país, que funcionaban debidamente y lograban, con la plata de los peajes, mantener en muy buen estado las que tenían a su cargo, como la Vía Panorama, la carretera a Buenaventura o la que va de Santander de Quilichao hasta Buga. Por esa misma fecha también se dio por terminada la concesión de mantenimiento de la recta Calipalmira y la de Puerto Triunfo a Santuario.
Desde hace un año, por negligencia o falta de cuidado, es decir por desidia, el gobierno del señor Duque no ha adjudicado los nuevos contratos de mantenimiento y, lo que es peor, se ha hecho a la plata de los peajes pero las carreteras en mención se encuentran desbaratadas. La disculpa inicial de este régimen era que la plata de los peajes de agosto a diciembre no había sido incluida en el presupuesto de Santos del año 2018 y, como tal, tampoco existía la manera de llevarla al gasto para el mantenimiento, por cuenta del Invías. Dicen que toda esa plata se fue al fondo común del Tesoro Nacional. Pero llegó el 2019 y como ya sonaba muy feo echarle la culpa al anterior gobierno y el presupuesto fue aprobado cuando ya la duquedesidia regía en Colombia, evidenciamos que lo que no han existido son ganas o responsabilidades para arreglar ese problema y evitar el deterioro mayor de tales carreteras. Ahora se vuelve a dar el caso. Sims Tech desmontará el 31 de agosto las 140 cámaras que vigilan varias vías y como es la desidia y no el señor Duque quien nos gobierna, no hay plan B para reemplazarlas.