El lenguaje de Francia
Al terminar las consultas presidenciales, el nombre de Francia Márquez es el que más se destaca; no por ser la ganadora de las consultas, sino por una gran votación que le permitió, finalmente, ser la fórmula de Gustavo Petro. Esta mujer afrodescendiente atrae el foco de todas las miradas y el interés de los medios, lo que le ha permitido ampliar su alcance y que su voz se escuche en todos los rincones de Colombia. Con ello, hemos tenido la posibilidad de conocer su manera de ver el país y sus propuestas.
Quiero hablar de un mensaje de Francia que tiene mucha importancia, pero que, producto de su verbalización, puede perder relevancia. Me refiero a su idea de una sociedad incluyente, que condensa con la frase “soy lo que somos”. Sin duda, estas palabras nos hacen reflexionar en torno a lo que debemos hacer para que el bienestar no se mida exclusivamente desde el individualismo, sino considerando que somos el resultado de lo que hacemos todos por los demás.
El mensaje de Francia Márquez es oportuno y necesario en un país y en una sociedad que ignoran las necesidades de otros; sin embargo, tan fuerte argumento se nubla por el exagerado uso de lenguaje inclusivo. Lejos de comunicar que la fuerza de esa idea radica en la unidad, termina por enfatizar las diferencias; ello hace que los titulares de las noticias tengan un lenguaje saturado y, en ocasiones, caricaturesco. Incluso, pienso que tanto énfasis en el lenguaje divide y ahonda las diferencias, mermando la fuerza de tan poderosa frase. Francia, por favor, no deje que este importante mensaje se pierda entre tanto “sustantive rebuscade”.