Bezos y el reto de IA
EN SU CONCEPTO, LA TECNOLOGÍA NO REMPLAZARÁ A LOS HUMANOS.
¿Acaso Bill Ackman, John Overdeck y David Siegel donaron mucho dinero para que los niños construyan robots y luego se vean desplazados por las máquinas cuando crezcan?
En un evento a beneficio de FIRST, organización de ciencia y tecnología sin fines de lucro que respaldan, la respuesta fue un rotundo no y provino de una fuente autorizada, Jeff Bezos, el hombre que tiene más de 10.000 personas trabajando en Alexa, servicio de voz de asistencia personal de Amazon.
“Desde mi punto de vista, es muy poco probable que las máquinas y la inteligencia artificial (IA) dejen a los humanos sin trabajo”, dijo Bezos en charla con Walter Isaacson.
“Cada pieza de productividad aumenta nuestra riqueza como sociedad, aumenta los empleos y hace que los trabajos sean más interesantes y de mayor calidad”, aseveró.
El empresario puso como ejemplo la maquinaria para mover tierras.
“Tendríamos muchos empleos si nos deshacemos de las excavadoras (...) Podríamos deshacernos de las palas y obligar a la gente a cavar con cucharas, pero eso no enriquecería a nuestra sociedad”, aseguró.
Futuros trabajos
En cuanto a manejar las expectativas sobre el futuro, Bezos elogio a los escritores de ciencia ficción por mostrarnos lo que es posible y criticó al resto de nosotros por nuestras habilidades predictivas.
“Somos tan malos para imaginar el futuro de los empleos (...) Si yo hubiera dicho hace 100 años que en el siglo XXI existirían los masajistas terapéuticos se habrían reído de mí”, aseguró.
Lo curioso es que los masajes terapéuticos pueden ser uno de los trabajos que podría hacer un robot, si Ackman, fundador de Pershing Square Capital, se sale con la suya. Él dijo que si pudiera hacer que un robot haga lo que él quiera, le pediría masaje.
Siegel, quien forma parte de la junta directiva de FIRST, aseguró que le gustaría un robot que vaya al trabajo por él. Lo manejaría desde casa. Overdeck, por su parte, espera un auto que se conduzca solo.
Dean Kamen, fundador de FIRST (e inventor del scooter eléctrico Segway), admitió que le gustaría un robot que cree órganos humanos para trasplantes, mientras que Noor Khalifa, estudiante de grado 11, afirmó que sueña con un robot que pueda detectar el cáncer antes de que el mal aparezca.