Avances contra ‘humo’
OMS destaca medidas y ambientes libres de cigarrillo. Electrónicos, riesgo.
● Colombia recibió el reconocimiento de la Organización Mundial de la Salud como uno de los países que ha sido aplicado en cumplir las estrategias de reducir la epidemia de tabaco. Pero los riesgos no se han esfumado.
A 11 años de la firma del Convenio Marco Antitabaco, considerada la única política de salud pública de alcance global, en el informe 2019 de la OMS sobre la lucha mundial contra el tabaco, publicado cada dos años, queda de manifiesto que ha habido una creciente mejoría en cuanto a políticas antitabaco en los países de ingresos bajos. En resumen, 23 países cuentan con medidas clínicas de apoyo al abandono de tabaco, 116 países ofrecen algún tipo de servicio de salud.
Ya 91 países tienen advertencias gráficas en los paquetes, 61 incluyen advertencias legales, 48 han prohibido la publicidad total, 103 tienen prohibiciones parciales, 38 países recaudan impuestos que alcanzan el 75 por ciento del precio, 62 tienen cargas impositivas entre el 50 y el 75 por ciento de dicho precio y 61 que va del 25 al 50 por ciento.
Colombia presenta indicadores favorables en la mayoría de las estrategias (mayor vigilancia, ambientes libres de humo, programas de cesación, advertencias, prohibición a la publicidad, aumento de impuestos y menor acceso a cigarrillos). Fue resaltado como uno de los 10 países que en los últimos dos años tuvo avances en el aumento de impuestos, al pasar de una carga tributaria de 49,5 % en el 2016 al 78,4 % en el 2018.
Y consecuentemente, pese a que Colombia aumentó el recaudo derivado de estos impuestos especiales en un 54 por ciento, las ventas de cigarrillos disminuyeron 23 % en comparación con el 2016, relata el informe. Pero hay riesgos. En Colombia se sabe que la mitad de los menores de edad que alguna vez tuvieron contacto con el tabaco lo hicieron a través de nuevos dispositivos. Y esta es justamente la otra preocupación de la OMS.
Con cifras claras, el reporte recomienda que cada país debe definir la forma de abordar el problema de los cigarrillos electrónicos y que como mínimo “deberían estar sujetos a las mismas políticas de control del tabaco convencional”.
“Hay que reconocer que Colombia va por buen camino, pero, no hay que bajar la guardia”, dijo Esperanza Cerón, Directora de Educar Consumidores.